Los candidatos presidenciales del PAN
, Ricardo Anaya , y del PRI , José Antonio Meade , luchan encarnizadamente, libran una batalla a muerte, por arrancar la campaña presidencial en el segundo lugar de las encuestas. Y mientras eso ocurre, nos comentan, Andrés Manuel López Obrador se lima las uñas.
Nos hacen ver que mientras Anaya y Meade se despedazan con acusaciones de corrupción , lavado de dinero y desvíos de recursos, el tabasqueño es testigo del agarrón y él permanece en el primer lugar de las encuestas.
Así, don Andrés se dedica a perseguir palomas , liberar tortugas, hacer chistes de rusos y hasta a jugar al balero, mientras sus competidores están en guerra .