Lavarse el pelo
puede parecer un acto simple, pero, ¿alguna vez te has preguntado si lo estás haciendo correctamente? Basados en expertos, en De Última quisimos aclarar cuestiones como el paso a paso adecuado para limpiar tu cabellera , en qué temperatura debe estar el agua, cómo aplicar el champú y si se puede prescindir del acondicionador . Además, responderemos a la pregunta común: ¿Puedo lavar mi pelo todos los días?
Tener un cabello saludable te hará lucir más hermosa y femenina.
Desenreda tu cabello antes de lavarlo
Quizá es un paso que muchas pasamos por alto, porque tenemos la costumbre de desenredar el pelo justo después de lavarlo . Varios expertos recomiendan cepillar el cabello cuando está seco, antes de ponerlo bajo el agua. De esta manera retiramos residuos de productos capilares, estimulamos la circulación del cuero cabelludo y, lo más importante, nos deshacemos de los nudos antes de humedecerlo.
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Cuando el pelo está mojado es mucho más frágil, hacer este paso previo ayuda a que sea más fácil desenredarlo después del lavado y se romperá menos.
Humedece tu pelo con agua tibia
Para empezar el proceso, el agua debe ser tibia, no muy caliente, no muy fría (esta la usaremos al final y luego te decimos la razón). Según los expertos de All Things Hair, el agua tibia elimina la suciedad y la acumulación de productos que aplicamos, además permite que la cutícula del pelo se abra y absorba los nutrientes e ingredientes activos de los cosméticos.
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Cuando está muy caliente “elimina todos los aceites naturales, reseca el cuero cabelludo y debilita las hebras”, aseguran.
Aplica champú en varias zonas y masajea con la yema de los dedos
La estilista Raquel Moreno explica a Vogue España que no debemos olvidar colocar el champú en tres áreas principales y en el siguiente orden: coronilla, nuca, patillas, de manera uniforme para cubrir toda la cabeza. Muchos especialistas coinciden al recomendar que usemos la yema de los dedos para masajear el cuero cabelludo (no muy fuerte ni con las uñas).
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Al hacer este masajito se activa la circulación en el cuero cabelludo y esto favorece el crecimiento del pelo . También puedes frotar con mucha suavidad la parte media y las puntas.
Puedes usar dos champús: en puntas y raíces
El especialista Moncho Moreno compartió otro tip valioso en Vogue. Se trata de usar dos champús a la vez: “El doble champú es la manera más inteligente de lavarse el cabello . Nunca va a ser igual la raíz que las puntas. La raíz acaba de nacer y necesita un tratamiento y las puntas tienen varios años de vida (depende del largo del cabello) y requieren algo más hidratante. Usando un champú tratante para cuero cabelludo y uno hidratante en las puntas, la raíz estará más sana y el pelo crecerá mejor”.
Sabemos que, por practicidad, es posible que sea mejor reservar el doble champú para una o dos veces por semana. Solo asegúrate de usar un champú que atienda las necesidades de tu pelo : si es graso o seco, si tiene tinte, si en este momento lo sientes reseco, por ejemplo.
El acondicionador sí es necesario
De Última
asistió a un evento donde Alejandro Chong, especialista en cabello de Natura México, aseguró que es un mito pensar que el acondicionador hace que el pelo se ponga más graso. “Cada vez que se lave el pelo , hay que usar acondicionador ”, enfatizó. Explica que el champú ayuda a abrir la cutícula y el acondicionador a sellarla, cada producto tiene una función. Cuando se usan mascarillas reparadoras o hidratantes (que recomienda usar de una a tres veces por semana), se puede colocar después del champú ; luego el acondicionador para sellar.
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Además, el acondicionador aporta suavidad, brillo y flexibilidad. Puedes aplicarlo desde la parte media del pelo hacia las puntas.
Enjuaga con agua fría y seca sin frotar
Es recomendable aclarar con agua fría para sellar la cutícula del pelo y se puedan retener los nutrientes de los productos especiales. Cuando las cutículas están cerradas, el pelo está suave, liso, brillante y sin frizz, según los especialistas de All Things Hair.
El agua fría ayuda a preservar los aceites naturales en las hebras, para tener una cabellera más suave y manejable. También cierra los poros del cuero cabelludo , “el agua fría cierra sus poros para que no estén vulnerables a la suciedad, el aceite y la grasa. Por lo tanto, el cuero cabelludo permanecerá limpio por más tiempo”, explican.
Seca con una toalla, preferiblemente sin frotar, porque el cabello húmedo es muy frágil, como ya hemos dicho. Puedes dar toquecitos con la toalla y presionar suavemente para que esta absorba la humedad.
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¿Puedo lavarme el pelo todos los días?
Lamentamos no tener una respuesta específica para esta pregunta. Porque tu melena es única y la frecuencia de lavado dependerá del tipo de cabello que tengas y sus necesidades en este momento. Un tiempo promedio óptimo puede ser entre dos a tres veces por semana.
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La dermatóloga Andrea Cobalia explicó al diario El Mundo que una limpieza excesiva elimina la barrera protectora natural del cuero cabelludo , la cual es necesaria para mantener la salud capilar. Por otra parte, si no se asea como debe ser, el exceso de sebo puede hacer que el pelo se ensucie porque atrae polvo y partículas contaminantes. Así que una clave para determinar la periodicidad de lavado puede ser la cantidad de grasa que desprende el cuero cabelludo.
Si el cabello es muy grasoso, se puede lavar diariamente o cada dos días. Si la persona realiza ejercicio y suda mucho es importante que lo lave después de la actividad. Cuando la limpieza es diaria, lo más aconsejable es usar champús suaves , sin sulfatos, porque suelen resecar menos.
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