francisco.resendiz@eluniversal.com.mx

Este lunes, al inaugurar el Parlamento Abierto 2016, del Parlamento Juvenil de México, el presidente del Senado de la República, Roberto Gil Zuarth, advirtió que en el mundo existe una gran "irritación social" ante la falta de respuesta de las instituciones a las demandas de su población.

Enfatizó que la falta de respuestas a los nuevos desafíos es “donde radica el principal de los problemas o por donde está fecundando el discurso del odio, el discurso racista, el discurso xenófobo, el discurso antipolítica y sobre todo el discurso contra las instituciones”.

El panista asentó que ante esta realidad hay dos rutas: “el camino fácil de las soluciones mágicas, el camino fácil de los iluminados, el camino fácil de los que creen que con una varita mágica se resuelven todos los problemas, o el camino difícil, el camino complejo de la política y de las instituciones”.

Subrayó, que este enojo se ve reflejado en discursos racistas y xenófobos que se han registrado en países como Estados Unidos. "La clase media norteamericana está enojada y por eso voltean a ver a Trump. Está enojada porque siente que la globalización, los mexicanos, México, les está quitando el empleo.

"Antes la manufactura de los automóviles estaba en Detroit, ahora no está en Detroit, ahora está en Guanajuato, mi empleo ya no está; está en otro país. Los mexicanos están -son las frases de Trump- chupando nuestros empleos", disertó el legislador de Acción Nacional.

El panista señaló que ese ciudadano norteamericano de clase media que siente que su empleo se lo robó alguien se enoja con su realidad "y en consecuencia empieza a escuchar el canto de las sirenas de quienes rechazan al otro, del discurso racista, del discurso xenófobo".

Indicó que lo mismo pasa en España o Grecia con as últimas expresiones en contra de la globalización y de la integración económica. Comentó que por ellos los británicos optaron en su mayoría por separarse de la Unión Europea pues la mayoría consideró que los extranjeros les hacían más tardado acceder a servicios como la salud.

“Ese modelo de desarrollo que se impuso en el Siglo 20 hoy está bajo un fuerte estrés porque el ciudadano del Siglo 21 no siente que esas instituciones les pueden responder a todas sus necesidades. Al contrario, que llega otro a mi comunidad, a mi vecindario, se eleva mi empleo, llega otro y me impide tener una atención pronta en salud, llega otro con otra religión, con otra cara, con otro color de piel y amenaza mi propia integridad o amenaza mi propia forma de convivencia”, analizó.

Gil Zuarth llamó entonces a enfrentar lo que definió como “el mayor desafío político actual”: la brecha del “enojo social” o “irritación social”, que no es otra cosa que -enfatizó- una brecha entre las expectativas sociales y la capacidad de respuesta de las instituciones.

Dijo que en México los ciudadanos están enojados con la política tradicional, con los políticos, con los partidos y con las instituciones políticas. Subrayó que se deben dar respuesta a las expectativas ciudadanas a través de las instituciones y no con “varitas mágicas”.

Atajó: “Si además de que no estamos dando respuesta a las expectativas de los ciudadanos, la gente percibe que nos robamos su dinero, la gente percibe que no hay manera de salir adelante en este país si no se paga con corrupción algo, si además de todo hay una cultura de privilegios que desplazan el mérito y el esfuerzo de las personas, por supuesto que tienen razón de estar enojados”.

jram

Google News

Noticias según tus intereses