Las autoridades venezolanas no acudieron hoy a la reunión que tenían prevista con una delegación de Colombia para tratar la situación de los más de mil deportados tras el cierre de la frontera común, informaron fuentes oficiales.

La reunión con el gobernador del estado venezolano del Táchira, José Vielma Mora, tenía como objetivo "iniciar un proceso de verificación" sobre las propiedades que los colombianos deportados en los últimos días dicen que fueron derribadas "de manera arbitraria", explicó a Efe el defensor del Pueblo de Colombia, Jorge Armando Otálora.

"Lamentablemente fuimos convocados a las dos de la tarde, estuvimos aquí con la compañía del embajador de Colombia en Venezuela (Ricardo Lozano Forero), del gobernador de Norte de Santander (Edgar Díaz) y decidimos retirarnos porque no asistieron", dijo Otálora sobre la cita, programada en el puente internacional Simón Bolívar, que une la colombiana ciudad de Cúcuta con la venezolana San Antonio.

Desde hace ocho días la frontera entre ambos países permanece cerrada tras el ataque de presuntos contrabandistas contra militares venezolanos que dejó tres uniformados y un civil heridos.

Dos días después, el presidente venezolano, Nicolás Maduro, decretó el estado de excepción en seis localidades limítrofes, lo que desencadenó una crisis humanitaria por la deportación de más de mil 100 colombianos y la llegada de manera irregular a la ciudad fronteriza de Cúcuta de otros 4 mil 260 ante el temor de ser expulsados por Caracas.

El miércoles, las cancilleres de ambos países, la colombiana María Ángela Holguín y la venezolana Delcy Rodríguez, anunciaron medidas para reducir la tensión, la primera de las cuales era la reunión que debía mantener hoy Otálora.

En este sentido, el defensor del Pueblo colombiano destacó que paralelamente está en contacto con su homólogo venezolano, Tarek William Saab, "para la realización del protocolo que se acordó ayer en la reunión de cancilleres que trae el procedimiento para la deportación de colombianos".

Otálora explicó que los colombianos "fueron expulsados de manera irregular", según las normativas venezolanas en este campo, si bien "lamentablemente" no pudo plantearlo hoy a las autoridades venezolanas.

Esa situación "es un pésimo mensaje para los colombianos" que se suma al de las numerosas irregularidades denunciadas por los deportados y quienes abandonaron el país antes de ser expulsados.

Preguntado por la posibilidad de elevar una denuncia a organismos internacionales por presuntas violaciones de derechos humanos y del Derecho Internacional Humanitario (DIH), Otálora afirmó que "ese es un tema en el que primero esperamos a que el Gobierno colombiano adopte las medidas necesarias".

"De no encontrar resultados diplomáticos positivos miraríamos que instrumentos jurídicos internacionales podríamos utilizar para pedir acompañamiento de medidas internacionales", concluyó.

ae

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