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La Fepade y el 1 de julio

El sistema electoral federal y local está preparado para hacerlo que le corresponde: organizar la jornada electoral, impartirjusticia y procurar justicia penal electoral. Pero la elecciónno es de las instituciones, sino de todos: todos somoscorresponsables y es imperativo que actuemos concivilidad democrática y estricto apego al marco legal

29/06/2018 |01:09
Redacción El Universal
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Las tres instituciones electorales federales, desde el ámbito de sus facultades, están empeñadas en garantizar que el proceso electoral culmine de manera normal y con ello se abone a la consolidación de nuestra democracia representativa. Estamos a días de la jornada y es condición indispensable que antes, durante y después de los comicios todos los actores que participan en ellos se conduzcan en el marco de la legalidad, con civilidad, tolerancia y respeto a la diversidad política.

A la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (FEPADE) le corresponde procurar justicia penal electoral y asegurar que prevalezca la emisión del voto libre y secreto de los ciudadanos, sin condicionamientos de ningún tipo. En el marco de nuestras atribuciones institucionales, en los últimos seis meses nos esforzamos por alcanzar el reto que representa el proceso electoral. Esta labor se elaboró por etapas:

Primero. Desarrollamos estrategias de prevención del delito, como es un Programa Nacional de Blindaje Electoral; capacitamos a casi 250 mil personas y planes focalizados para grupos vulnerables.

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Segundo. Desahogamos las investigaciones en curso, concluyendo más de mil 500 asuntos e investigando de manera rápida algunas de las denuncias recibidas, tal es el caso de las firmas falsas a candidatos independientes, quienes admitieron su culpabilidad y el juez los sancionó.

Tercero. Preparándonos para la jornada electoral, este año la FEPADE, con el apoyo de la Procuraduría General de la República, desplegará 14 mil 600 servidores públicos, entre ellos ministerios públicos, peritos, policías de investigación, auxiliares ministeriales. Con esos elementos estamos listos para atender las denuncias que se presenten por delitos electorales e inhibir acciones que vulneren el voto libre y secreto.

El sistema electoral federal (INE, TEPJF, FEPADE) y local (OPLES, Tribunales y Fiscalías) está preparado para hacer la parte que le corresponde; es decir, organizar la jornada electoral, impartir justicia y procurar justicia penal electoral. Pero la elección no es de las instituciones, sino que es de todos, actores políticos, partidos, candidatos y, especialmente, de los ciudadanos mexicanos. Porque todos somos corresponsables y es imperativo que actuemos con civilidad democrática y estricto apego al marco legal. Pues como sociedad nos conviene que sea una elección ejemplar, por la que el voto soberano de los ciudadanos determine la representación política de nuestro país.

La FEPADE ha consolidado su identidad y se ha convertido en el referente en materia de procuración de justicia penal electoral. Su función no consiste en judicializar la política, pues se diseñó para defender la democracia, prevenir e investigar delitos electorales y hacer que se respeten los parámetros de legalidad. En cada elección que participamos cumplimos con estos objetivos, que el 1 de julio estarán asegurados.

El día de las elecciones es el momento clave de la democracia, ya que durante ese día se pone de manifiesto el interés de los ciudadanos y, con el ejercicio de su voto, escrutado y contado debidamente, se documenta la suma de voluntad ciudadana, que en cada demarcación electoral habrá de conformar la mayoría, que constituye la fuente de legitimidad de origen de quienes serán electos como representantes populares a nivel federal y local.

Las instituciones que la democracia mexicana a lo largo de las últimas décadas ha creado, para organizar, tutelar y garantizar la legalidad del proceso electoral y del resultado de las urnas, así como de las expresiones y manifestaciones sociales y políticas que discurren en torno al proceso electoral, se encuentran preparadas para cumplir con la parte que les corresponde el próximo 1 de julio.

Ha llegado el momento definitorio en el que debe expresarse la autonomía de la voluntad de los electores. La obligación inexcusable de las instituciones del Estado mexicano es respetar esa voluntad, cumpliendo con sus funciones y propiciando, con su trabajo eficiente y eficaz, el clima de concordia y convivencia social que requiere el país, antes, durante y después de la jornada electoral del próximo domingo.

El país trascenderá la jornada electoral con paz social, sosiego, tolerancia, talante democrático y perspectiva de futuro. Con ese marco de referencia y ese horizonte civilizatorio trabajamos en la FEPADE, y así lo haremos hasta que concluya el proceso electoral.

Titular de la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales