El Real Madrid dio un nuevo aire a la Liga española al llevarse el Clásico ante el Barcelona por 1-2, después de voltear en el tramo final un duelo mayormente dominado por los azulgrana.

A cinco minutos para la conclusión del duelo, Cristiano Ronaldo aguó la fiesta azulgrana con un tanto que, sumado al firmado por Karim Benzema en el 62’, acabó con la imbatibilidad del Barcelona esta temporada en el Camp Nou, truncó su racha de 39 partidos sin conocer la derrota y recortó a siete puntos la distancia en la punta de la Liga.

Además, con este gol el portugués superó en su duelo particular a Lionel Messi, ya que desde que ambos están, al mismo tiempo en sus equipos, ‘CR7’ ha marcado en 16 ocasiones en el Clásico por 15 del argentino.

Aunque las esperanzas de los dirigidos por Zinedine Zidane de reengancharse a la lucha por la Liga son muy escasas, el triunfo blanco revitalizó al Atlético de Madrid, a seis puntos del Barcelona, después de su goleada 5-1 sobre Betis.

Un gol de Gerard Piqué adelantó al Barcelona en el 56’, pero la alegría les duró poco, pese a dominar hasta entonces el choque; los culés sucumbieron después ante la pujanza del Real Madrid.

Como si el homenaje previo a Johan Cruyff los hubiera sobrecogido en exceso, a los culés les faltó puntería y, al final, físico, pese a que el Madrid acabó el Clásico con 10 por la expulsión de Sergio Ramos por doble amarilla.

Mientras los de Luis Enrique dominaron de manera escandalosa la posesión, el Madrid trató de salir al contrataque. La acción más polémica llegó cuando Messi le rompió la cintura a Ramos y éste lo derribó aparentemente al borde del área. El árbitro, sin embargo, no observó nada y el lance pareció activar al Real Madrid y despistar al Barcelona.

A la vuelta de la pausa, los azulgrana decidieron cercar el arco de Navas, quien voló para sacar una fabulosa mano ante un disparo genial de Lionel Messi. Nada, sin embargo, pudo hacer el tico minutos después, ante el testarazo de Piqué.

Instantes después, Benzemá igualó el duelo al aprovechar un balón rebotado en el área azulgrana con una media vuelta.

El gol pareció demasiado premio para el pobre juego de los de Zinedine Zidane que, a partir de entonces, se crecieron hasta el punto de pasar a dominar el duelo y a los azulgrana.

Y si la victoria no llegó antes para el Real Madrid fue porque el árbitro anuló un gol al galés Gareth Bale, y porque, en la siguiente jugada, el palo desvió un potentísimo disparo de Cristiano Ronaldo.

El Barcelona lucía cansado y noqueado. Pero la expulsión de Ramos, por doble amarilla, a siete minutos para la conclusión, parecía darle algo de aire. Nada más lejos de la realidad. Cristiano remató a los culés casi en el suspiro final, se tomó la revancha tras la derrota de la primera vuelta y rearmó de moral, aunque pese a la victoria, siguen estando a siete puntos del Barcelona.

Google News

Noticias según tus intereses