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hector.morales@eluniversal.com.mx
La silla de Leonardo Cuéllar como director técnico de la selección femenil quedó vacante, luego de 18 años de labor. Ahora, Iris Mora levanta la mano para sucederlo.
Tiene en su proyecto un programa de visorías que “potenciaría el talento que tenemos” para poder competir de tú a tú con las grandes selecciones del género.
No sólo eso. En entrevista con EL UNIVERSAL, la que fuera delantera del Tri quiere ser un ícono para las mujeres, ahora que se ha recrudecido la violencia en contra de ellas.
En un contexto en el que fueron asesinadas en el país 26 mil 267 féminas de 2000 a 2014, según el INEGI, Mora señala que quiere ser un agente de cambio como una mujer empoderada que provoque transformaciones positivas en una sociedad que, dice, aún es “machista”.
¿Por qué quieres ser directora técnica de la Selección Femenil de México?
Conozco la estructura, que es diferente a cualquier otra selección del mundo. Tienes que hacer mucho trabajo de campo. Conozco el bajo mundo, porque cuando llegas arriba, si no conoces la estructura, no sabes. El perfil ideal no es el candidato natural, sino el que conozca el futbol femenil, que tenga liderazgo y que pueda potencializar lo que puedes hacer. Tengo la capacidad, el conocimiento, y yo considero que bajo presión funciono muy bien. Una mujer [como entrenadora del Tri] sería fenomenal, pero necesita ensuciarse las manos.
¿Cómo detectar talento sin una liga profesional en el país?
Es difícil. Ahorita la Federación [Mexicana de Futbol] busca evolucionar el programa femenil. Es necesario hacer un sistema de visorías. Si logramos juntar la labor de las ex jugadoras que ven el talento, podemos potencializar a todas las jóvenes que tienen calidad. No es fácil. Leo [Cuéllar] hizo un gran trabajo. 18 años de logros. Hoy, el futbol femenil se puede comercializar, hay medios que quieren transmitir al futbol femenil. No puede ser sólo una persona, sino involucrar a todos.
¿Continuar o romper con el legado de Leonardo Cuéllar?
Hablar de Cuéllar es hablar de logros, no puedes descartar lo que ya se hizo. Es evolucionar o morir. La estructura está, ahora hay que sumar a la gente que sabe del proyecto, a equipos profesionales. Cuando nos juntemos vamos a ver el valor de todo esto. Mi generación [1998] jugó en el Azteca ante 90 mil personas, podemos aprovechar eso.
¿Aún hay prejuicios para que la mujer juegue futbol?
Hay un cambio de cultura importante. El empoderamiento de la mujer está a tope. La mujer es exitosa. Las mismas empresas están interesadas en tener jefas. El futbol es un deporte que te forma, que te permite tener estudios. Es necesario que las mamás y papás apoyen a las niñas.
Se ha recrudecido la violencia hacia la mujer, ¿el futbol puede funcionar como un freno hacia ese fenómeno?
Se me pone la piel chinita. Somos parte de una cultura machista, donde a la mujer le ha costado mucho trabajo. Las mujeres estamos levantando la mano para tomar puestos importantes, como yo con la selección femenil, que seamos representantes de México. Que no nos dé miedo actuar, que nos vean trascender tanto en el deporte como desde la trinchera de cada quien.
