La infusión natural y deliciosa que termina con gases y cólicos gastrointestinales

La infusión de orégano con limón es una bebida natural que combina las propiedades medicinales de dos ingredientes ampliamente conocidos por sus beneficios para la salud. Utilizado desde el siglo II después de Cristo, el orégano no solo es un ingrediente clave en la dieta mediterránea, sino también una fuente rica de nutrientes y compuestos beneficiosos. Cuando se le añade limón, rico en vitamina C y otros minerales esenciales, esta infusión se convierte en un remedio casero potente y delicioso.

El orégano, por su parte, contiene grasas totales, proteínas, calcio, sodio, potasio, magnesio, fósforo y zinc, junto con vitaminas A, E, B1 y B2, aunque en cantidades menores. Además, posee timol, carvacrol y borneol, que le confieren propiedades carminativas, aliviando problemas estomacales como los gases y cólicos gastrointestinales. Según Nutrición y Farmacia, el orégano también actúa como un potente antioxidante debido a los ácidos fenólico y rosmarínico, y contiene flavonoides que combaten la degeneración de la piel y otros tejidos orgánicos, haciéndolo ideal para esta infusión.

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El limón, por otro lado, es una fuente de calorías, carbohidratos, proteínas, grasas, fibra, sodio y potasio. También aporta vitaminas A y C, ácido fólico, calcio, hierro, zinc y fósforo. Además de sus propiedades bactericidas y de refuerzo del sistema inmunológico, el limón es conocido por su capacidad para alcalinizar el organismo, estimular la eliminación de toxinas por el hígado y facilitar la digestión, especialmente de grasas.

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Cómo preparar la infusión perfecta de orégano y limón para tus cólicos

La combinación de orégano y limón en una infusión crea una bebida con múltiples beneficios para la salud. Según Fuente Saludable, esta infusión es eficaz para calmar el dolor de estómago, las molestias de garganta y los síntomas de la gripe, la tos y los resfriados. Para prepararla, se debe hervir una taza de agua, agregar una cucharada de orégano seco y el jugo de dos limones, dejar reposar durante 15 minutos, colar y endulzar con miel.

Si bien esta infusión es generalmente segura para la mayoría de las personas, las mujeres embarazadas no pueden utilizarlo como opción, ya que el té de orégano está contraindicado en este caso.

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