Más Información
Un sorprendente caso ha captado la atención en las redes sociales, donde un hombre nigeriano se ha convertido en noticia tras intentar romper un récord Guinness que lo llevó a quedarse temporalmente ciego. Tembu Embere, quien se describe como un comediante, emprendió el desafío de llorar durante siete días consecutivos, compartiendo su experiencia a través de su cuenta de TikTok.
En el video viral de TikTok, se puede ver a Tembu sentado en una silla, claramente llorando, con un cronómetro al lado, indicando que llevaba más de dos horas en el reto. Sin embargo, lo más asombroso fue cuando confesó que durante aproximadamente 45 minutos perdió temporalmente la vista mientras estaba inmerso en su llanto prolongado.
Leer también: TikTok: Joven se viste de Max Steel para ver Barbie con su pareja y se viraliza
Durante los días de su desafío, el hombre experimentó intensos dolores de cabeza, hinchazón en los ojos y la cara. A pesar de los obstáculos y las dificultades que encontró en el camino, Embere estaba decidido a alcanzar su objetivo de llorar durante una semana entera.
Leer también: VIDEO: Exhiben a taquero en TikTok por lavar trapeador en comal de puesto callejero en CDMX
El interés por romper récords Guinness en Nigeria ha aumentado en los últimos meses, siendo una nación que busca destacar en el libro de récords con desafíos extravagantes y únicos. Desde el maratón de cocina de cuatro días de un chef que cautivó al público hasta este singular intento de llorar durante una semana, los nigerianos han buscado sobresalir y dejar su huella en el ámbito de los récords.
Sin embargo, Guinness World Records ha instado a los aspirantes a que sus retos sean realizables y ha recomendado que los interesados se comuniquen con la organización para asegurar el reconocimiento de sus logros. También ha aconsejado evitar la realización de "maratones de récords" para preservar la seriedad de los desafíos y evitar riesgos innecesarios. Aunque la historia de Tembu Embere ha generado sorpresa y admiración en las redes sociales, también ha generado debate sobre los límites de los desafíos y la importancia de asegurar que los intentos de romper récords sean seguros y factibles.