Son ya 11 años de la llegada del piloto finlandés a la Fórmula 1 , dos de los cuales los pasó en la banca aun cuando venía con varios campeonatos bajo el brazo, incluidos un bicampeonato de Fórmula 3 y uno más de la GP3 Series.

Su paso a Mercedes en 2017 significó un gran paso para el nacido en Nastola, Finlandia hace 31 años, después de un gran segundo año en Williams (donde pasaría tres), donde resultó ser el mejor piloto del resto, finalizando cuarto detrás de las flechas de plata de Hamilton-Rosberg y del Red Bull de Daniel Ricciardo.

La llegada de Bottas a Mercedes sustituyendo al monarca Nico Rosberg fue sorpresiva, en primera porque pocos esperaban que el alemán colgara el casco sin defender su corona. Valtteri encajó rápidamente en el equipo, pero no de la manera en que habría imaginado, sí sumando puntos para mantener la hegemonía de la escudería en el campeonato de constructores como un buen escudero, trayendo armonía al equipo, luego de los años de batallas internas entre Hamilton y Rosberg. Sus dos primeros años en Mercedes no fueron brillantes, primero tercero (en 2017) y luego quinto (en 2018), abajo no sólo de su coequipero, Vettel y Raikkonen, sino de un joven Max Verstappen.

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Aun cuando ocupa uno de los asientos más preciados y cuenta con un par de subcampeonatos, la posición de Bottas en Mercedes ha estado en el ojo del huracán. Varias premisas lo han marcado: primero el famoso “es el auto”, luego el “escudero de Lewis”, y finalmente “el que corre para sí mismo”. Cada una de sus nueve victorias en F1 (por 17 poles) han sido de la mano de un manejo pulcro y frío, al más puro estilo de la tradición finesa, aunque ante Hamilton nada parece ser suficiente.

En 2019, buscó plantarle oposición, llegó concentrado y desafiante, pero sólo pudo mantener el ritmo con el inglés por cuatro carreras, donde ambos tuvieron dos segundos lugares y un par de victorias, para sucumbir al final por una diferencia de 87 puntos. En 2020 buscó hacer lo mismo y aunque declaró que ya no estaba para atender todas las órdenes que el equipo le diera para favorecer a Hamilton, el resultado fue el mismo: subcampeonato y con una diferencia de 124 puntos.

Este 2020 puso una lastre sobre su asiento: George Russell, la novel promesa de Mercedes que corre en Williams, suplía a Lewis por Covid-19 en el Gran Premio de Sahkir, haciendo la pole y casi ganando la carrera. Los nubarrones se posaron más que nunca sobre Bottas, el resultado ante Russell fue aplastante: “Alguien que no sepa de F1 después de ver esta carrera pensará que soy un idiota”, comentó el propio Valtteri.

@jorgedialogante

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