La mortandad de 3.5 por ciento de tortugas recién nacidas en el corral de incubación de Playa Delfines ubicada en la zona hotelera de Cancún, Quintana Roo, ocurrió por causas climáticas y biológicas propias de la especie, informó la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente ( Profepa ).

De acuerdo con registros de autoridades municipales responsables de esa zona, señalan que poco más de 40 mil huevos de tortuga completaron debidamente su ciclo natural de eclosión y 513 fallecieron en ese proceso .

En atención de una denuncia pública, constató que ese sitio es operado por la Dirección General de Ecología del municipio de Benito Juárez, autorizado mediante el oficio SGPA/DGVS/05816/17 del 13 de Julio del 2017, otorgado por la Dirección General de Vida Silvestre para el aprovechamiento no extractivo con tortugas marinas .

La Profepa reveló que entre enero y octubre se reubicaron 535 nidos de quelonios de distintas especies , recuperados o rescatados de toda la zona federal marítimo terrestre que conforma el área hotelera de Cancún, de los cuales 405 eclosionaron.

Como resultado de la inspección se constató que el corral de incubación tiene dimensiones de 45 metros de largo por 10 metros de ancho y 1.50 metros de alto ; y está construido con postes de madera y malla-sombra.

Al momento de la visita, se pudo comprobar la existencia de 130 nidos de tortuga blanca de la especie Chelonia mydas .

El campo tortuguero está ubicado a una distancia de 28 metros de la pleamar máxima y se encontró libre de cercos metálicos o bases de concreto u otro elemento, obra o actividad que obstaculice el libre acceso de las tortugas marinas para su desove o el desplazamiento de las crías hacia el mar.

En todo el litoral de Quintana Roo se puede observar el arribo a sus playas de hembras de cuatro especies de tortuga marina, la tortuga Láud (Dermchelys coriacia), la Tortuga Blanca (Chelonia mydas), la tortuga Caguama (Caretta caretta) y la tortuga Carey (Eretmochelys imbricata).

Esas especies están clasificadas bajo la categoría de riesgo “en peligro de extinción” por la Norma Oficial Mexicana NOM-059-SEMARNAT-2010 e incluidas en el Apéndice I de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES, por sus siglas en inglés).

Asimismo, forman parte de la Lista Roja de la Unión Mundial de la Conservación (IUCN, por sus siglas en inglés), la cual califica la condición de las tortugas carey y laúd en “peligro crítico de extinción” , de las tortugas caguama y la Blanca como “en peligro”.

Para su protección y regulación de los campamentos tortugueros existe la Norma Oficial Mexicana NOM-162-SEMARNAT-2012, que establece las especificaciones para la protección, recuperación y manejo de las poblaciones de las tortugas marinas en su hábitat de anidación.

Las violaciones cometidas a la Ley General de Vida Silvestre podrán ser sancionadas con la imposición de una multa por el equivalente de 50 a 50 mil días de la Unidad de Medida y Actualización vigente en la Ciudad de México.

ahc

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