Alejandro Moreno Cárdenas, presidente de la Conferencia Permanente de Partidos Políticos de América Latina y el Caribe (Copppal), informó que enviarán misiones de observación electoral a Guatemala y Ecuador, que celebrarán elecciones el próximo 20 de agosto.
El presidente de la Copppal señaló que las misiones de observación asisten a dos procesos electorales con escenarios sumamente complicados.
Durante una reunión, expuso que en Guatemala la democracia se encuentra seriamente amenazada ante las acciones judiciales que ha llevado a cabo la derecha para inhabilitar a Bernardo Arévalo y su partido Semilla, que lograron transitar a una segunda vuelta electoral junto a Sandra Torres, del Partido Unidad de la Esperanza (Une).
Moreno apuntó que son dos candidatos socialdemócratas que deben concurrir el próximo 20 de agosto, pero con acciones al margen de la ley se ha buscado dinamitar el proceso electoral.
“En Guatemala, los partidos progresistas de la Copppal estamos librando una fuerte lucha para que se respeten los resultados de la primera vuelta, resultados que el gobierno autoritario de ese país busca alterar, por medio del uso indebido de instrumentos jurídicos para fines de persecución política e inhabilitación de un adversario, por eso nuestro rechazo contundente a este tipo de prácticas que lastiman la democracia y el Estado de Derecho”, manifestó Alejandro Moreno.
En el caso de Ecuador, alertó que vive un escenario de violencia, crispación, de gran polarización política, que llevó a que, ante la incapacidad para construir acuerdos de las dos principales fracciones representadas en la Asamblea Nacional, el gobierno decretara la denominada “muerte cruzada”.
Dicho mecanismo permite al Ejecutivo y Legislativo disolverse mutuamente y de forma anticipada llamar a elecciones, las cuales se realizarán en medio de una crisis política que podría nuevamente llevar a la fragmentación del poder.
Subrayó que la Copppal ha estado trabajando para que mediante el diálogo permanente y respetuoso se puedan construir acuerdos entre todos los actores políticos de esas naciones y las elecciones se puedan realizar en un marco de paz, respeto, tolerancia y convivencia cívica.