Tokio.— El primer ministro japonés, Shinzo Abe, visitó ayer la región septentrional de Hokkaido, golpeada por un terremoto, que dejó 39 muertos, de acuerdo con un nuevo balance dado a conocer por las autoridades.

Abe visitó Sapporo, la principal ciudad de la región, donde el terremoto de magnitud 6.6 del jueves provocó derrumbes de casas.

También estuvo en el barrio de Kiyota, donde la tierra se hundió hasta un metro, lo que provocó que las casas se inclinaran. Además, desencadenó una corriente de lodo que se solidificó y dejó vehículos atrapados en estacionamientos.

La mayoría de los muertos se registraron en la pequeña localidad rural de Atsuma, donde un conjunto de viviendas quedaron destrozadas por el deslizamiento de una ladera.

También visitó los refugios de evacuación en Atsuma antes de reunirse con el gobernador de Hokkaido, Harumi Takahashi.

El recorrido del primer ministro se produce mientras continúan las operaciones de búsqueda y rescate para encontrar a dos personas que permanecen como desaparecidas.

Ayer, los socorristas utilizaban excavadoras y palas para remover la tierra, los árboles caídos y escombros de las casas que fueron arrasadas por los numerosos deslaves.

“Fui testigo de la horrible destrucción. En un centro de evacuación, escuché graves historias de víctimas del desastre que están en una situación de inseguridad y complicada”, dijo Abe, según la agencia Kyodo News.

Tras su visita, el primer ministro volvió a Tokio para asistir a un consejo extraordinario de ministros que debe liberar fondos de ayuda.

“Hay lluvias intermitentes en Atsuma. Las labores continúan para buscar a las personas desaparecidas”, dijo a la AFP un funcionario regional de gestión de desastres.

El gobierno central desplegó miles de efectivos de rescate para buscar a los desaparecidos. El sismo fue el más reciente desastre natural en el país. La semana pasada fue golpeado por el tifón más potente en 25 años, que mató a 11 personas.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Más Información

Noticias según tus intereses