El Día de San Valentín se tornó en una pesadilla en la preparatoria. Stoneman Douglas de Parkland, Florida, una localidad que apenas el lunes pasado fue incluida en la lista de las ciudades más seguras para vivir en Estados Unidos.

Ayer, minutos después de las 15:00 horas de Florida (14:00, tiempo de México), Nikolas Cruz, de 19 años descargó su rifle AR-15 en los pasillos de la que fue su escuela, generando pánico entre los estudiantes que buscaban refugio, mandaban mensajes a sus padres y grababan el momento.

Nicole Baltzer, de 18 años, relató a la cadena CNN que ella estaba en trigonometría y 10 minutos antes del final de las clases sonó la alarma de incendios. Mientras los estudiantes iniciaban la evacuación se escucharon los primeros disparos, todo fue confusión y muchos intentaban regresar a sus salones para refugiarse. “Escuché muchos disparos, al menos seis. Estaban muy cerca”, dijo la estudiante a la cadena de televisión.

Jeiella Dodoo, otra alumna, contó a CBS News que cuando escuchó la alarma pensó que era un simulacro de rutina y se lo tomó con calma. Después “escuché seis disparos; unas personas empezaron a correr y luego todo el mundo empezó a correr porque pensamos: ‘Sí, esto es real, entonces simplemente a correr’”.

Videos compartidos por los estudiantes en redes sociales muestran a los jóvenes intentando protegerse detrás de sus sillas y en el suelo, mientras se escuchan los disparos de Cruz, de 19 años, a quien las autoridades señalan como el responsable del ataque.

Bailey Vosberg, también estudiante, contó a la cadena CBS que cuando escuchó las detonaciones pensó que eran cohetes hasta que un amigo le preguntó: “¿Escuchaste eso?”. “Inmediatamente lo supe. No le dije nada, salté la valla [del límite de la escuela] y me dirigí directamente a la carretera. Cuando llegué allí había coches Swat [de los equipos especiales de policía de Estados Unidos] y unidades de policía y helicópteros”, describió.

Una maestra contó a la televisora local WSVN que cuando empezó el tiroteo ella se refugió con un grupo de alumnos en un clóset, donde permanecieron unos 40 minutos.

El diario Miami Herald contó la historia de un entrenador, identificado como Aaron Feis, quien saltó frente a sus estudiantes para protegerlos y sería una de las víctimas fatales.

Muchos de los padres se enteraron del tiroteo por los mensajes que les enviaron sus hijos para hacerles saber lo que pasaba y que se encontraban a salvo. Joseph Panikulangara contó que su sobrina Dhiya de 17 años, estudiante de último año, le avisó lo que estaba ocurriendo por mensaje de texto, y le dijo que era un “caos en todas partes”.

Caesar Figueroa dijo a CNN que su hija estaba escondida en un armario, mandando mensajes de texto a su familia. Les dijo que estaba escondida junto con 10 amigos. “Una ventana estalló y todo el mundo gritaba y corría. Entonces corrió al armario”.

Tras darse a conocer que había un tirador activo en la escuela, decenas de padres llegaron hasta el lugar, preocupados por sus hijos. Muchos estudiantes tardaron más de una hora en ser evacuados, debido los protocolos, de seguridad ya que la policía tardó en detener al atacante, quien intentó escapar haciéndose pasar por un estudiante.

El hijo de 17 años de Len Murray, un estudiante de segundo año, les envió a sus padres un aterrador mensaje de texto: “Mamá y papá, hay disparos en la escuela. Afuera se escuchan las sirenas de la policía. Estoy en el auditorio y las puertas están cerradas”.

Minutos después volvió a escribir: “Estoy bien”.

Murray dijo que se apresuró hacia la escuela y que las autoridades le marcaron el alto debajo de un puente de la autopista, desde donde se ve el lugar. Dijo que le pidió a su hijo que ahorrara la batería de su teléfono y dejara de enviar mensajes, mientras que su madre le pidió que apagara el timbre.

“Tengo miedo por los otros padres que están aquí. Se les ve la preocupación en el rostro. Todo el mundo pregunta: ‘¿Has sabido de tu hijo?’”, indicó Murray.

La madre de Crystal, una de las estudiantes, relató a la cadena ABC que ella estaba en el salón de belleza cuando recibió un mensaje de su hija en el que le dijo que había un tiroteo en su escuela y estaba asustada.

“Estamos a salvo, mamá. Quédate lejos”, le escribió Crystal, y tras el mensaje ella corrió a la escuela en busca de su hija.

“Hemos sido liberados. Dios bendiga a Estados Unidos”, publicó en Twitter un estudiante de primer año llamado Aidan tras ser evacuado del edificio. “Ámense. Nunca se sabe cuándo puede ser el último día que vean a alguien”, agregó en su mensaje. Redacción con información de agencias

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Más Información

Noticias según tus intereses