Tultepec, Méx.— Expertos del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) iniciarán una investigación conjunta de los restos de los 60 mamuts hallados de Santa Lucía y de los 15 localizados en la Capital de la Pirotecnia, a fin de recrear lo que ocurría en esta zona hace más de 14 mil años, según autoridades municipales y federales.
Joaquín Arroyo Cabrales, profesor investigador del Laboratorio de Arqueozoología de la Subdirección de Laboratorios y Apoyo Académico del INAH, junto con tres científicos más, visitaron el Museo del Mamut de Tultepec y la zona de excavación, donde aún se rescatan osamentas.
Arroyo Cabrales, quien también es coordinador del proyecto La Prehistoria y paleoambientes del noroeste de la cuenca de México, precisó que en la investigación también participará el arqueólogo Luis Córdoba Barradas, responsable y titular de los proyectos de rescate de osamentas de mamut Tultepec I y Tultepec II, quien igual ha estado en hallazgos de Coacalco, Tultitlán y Ecatepec.
Los especialistas que ya colaboran en los trabajos de rescate de osamentas también participarán en esta investigación, como son Rubén Manzanilla López, de la Dirección de Salvamento Arqueológico del INAH, y Eduardo Corona Martínez, profesor investigador del Centro INAH Morelos.
Por la relevancia mundial generada por los hallazgos de Tultepec y Santa Lucía, el INAH acordó reunir a un grupo de al menos 12 especialistas, informó Joaquín Arroyo Cabrales.
En un radio de unos ocho kilómetros se va a realizar esta investigación científica a fondo en torno a todo lo que rodea a las osamentas de mamuts encontradas, “para ir mucho más allá del simple rescate”, apuntó.
Joaquín Arroyo indicó que evalúan “las dificultades a las que nos enfrentaremos cada uno de los investigadores en sus respectivos campos a efecto de recuperar el mayor número de elementos y hacer una reconstrucción paleoambiental”.
La investigación implica conocer cómo era el sitio hace 10 mil, 14 mil o 15 mil años, entender cómo vivieron, qué comían o con qué otros animales convivían.
“Lo que haremos será leer lo que nos dicen los diferentes huesos encontrados”, celebró el científico.