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El reto de Amieva para la fiesta de muertos
Todo parece indicar que en pleno festejo de Día de Muertos, el jefe de Gobierno, José Ramón Amieva, podría llevarse un buen susto y no por los que vienen del más allá, sino por los más de 7 mil migrantes centroamericanos que llegarán a la Ciudad de México y a los que no ha decidido dónde albergará. El problema no sólo es de alojamiento y alimentación, sino de la salud. Nos explican que los migrantes ya acumulan muchos días de privaciones, por lo que las autoridades de la CDMX alistaron brigadas de servicios médicos para verificar que no haya brotes epidémicos entre los integrantes de la caravana que puedan poner en riesgo a los capitalinos. A todo lo anterior, habría que sumar que van a llegar cuando en la Ciudad no habrá agua. Vaya días pesados que le esperan a don José Ramón en el tramo final de su gestión.
Va el Hospital de Cuajimalpa
Para los escépticos y opositores al Hospital General de Cuajimalpa, en las últimas semanas se ha dado información importante que confirma que la obra que dejó pendiente Miguel Ángel Mancera sí se va a cumplir. Primero la Secretaría de Obras dio a conocer la empresa que construirá el nuevo centro de salud y, ayer, la jefa de Gobierno electa, Claudia Sheinbaum, informó que destinará 700 millones de pesos del presupuesto a esta obra, para que se concluya y esa zona de la ciudad cuente con un centro especializado de atención, sobre todo en materia de traumatología, que atienda todos los percances que se presentan en la carretera México-Toluca, que no son pocos.
Las cuentas del Instituto Electoral capitalino
A principios de año se pronosticaba que el Instituto Electoral de la Ciudad de México afrontaría un vendaval político con el pasado proceso electoral; sin embargo, en el organismo que encabeza Mario Velázquez comienzan a hacer un balance y, según ellos, los resultados son positivos. Incluso, refieren los premios que obtuvieron recientemente, como el Reed Latino Awards 2018, por las campañas que realizaron para la promoción de los comicios y el voto de los chilangos en el extranjero. Si bien este año no les fue mal, aún tienen enfrente la primera negociación con los diputados de Morena para sacar adelante el presupuesto de 2018, en la que vienen con la espada desenvainada para hacer recortes.
Ecatepec, la bomba de tiempo
A dos meses de que entregue el alcalde priísta de Ecatepec, Indalecio Ríos, las cuentas no son nada halagadoras. Deja un ayuntamiento sumido en la marginación, pobreza y ocupando los primeros lugares en incidencia delictiva, nada de qué presumir. Por el otro lado, el presidente municipal electo, el morenista Fernando Vilchis va a tomar una bomba de tiempo y contará con tres años para desactivarla y reencausar a uno de los municipios más grandes del Estado de México; todo ello derivado del abandono en que la han tenido los gobiernos de los diversos partidos, quienes han utilizado a sus habitantes como botín político para los procesos electorales.
