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El secretario de Seguridad y Protección Ciudadana (SSPC), Alfonso Durazo, dijo que Benjamín Yeshurun Sutchi y Alon Azulay, los asesinados el miércoles en Plaza Artz, tenían vínculos con organizaciones criminales en México y estaban implicados en lavado de dinero.

Entrevistado en Palacio Nacional luego de que el presidente Andrés Manuel López Obrador señaló que el doble crimen está vinculado con el crimen organizado y por ello ya trabaja en el caso la Secretaría de Marina y la SSPC, Durazo Montaño reiteró que los asesinatos se tratarían de un ajuste de cuentas.

“Son organizaciones de carácter internacional que tienen vínculos con células nacionales. No voy a adelantar en este momento, pero llegará el tiempo en el que compartiremos información propia, lo que sí puedo decir es que hay vínculos con organizaciones criminales del país por lavado de dinero, principalmente”, aseveró el funcionario.

“Son ajustes de cuentas entre integrantes de bandas del crimen organizado, de disputas, de relaciones con organizaciones y por territorios de lavado de dinero”, reiteró.

Durazo dijo que no adelantaría información precisa sobre el caso, puesto que sigue la investigación, pero lo que sí es un hecho es que “estas organizaciones criminales israelíes tiene relaciones con organizaciones criminales del país”.

Aunque fuentes consultadas señalan que desde el arribo en abril pasado de Benjamín Yeshurun Sutchi, las autoridades locales fueron informadas; sin embargo, no tenían investigaciones en su contra.

“Que nadie se sorprenda. Estas colaboraciones son normales y permanentes con todos los países, porque el crimen organizado tiene una característica, su dimensión internacional, y para enfrentarlo es imprescindible el intercambio de información”, reconoció Durazo.

Indagatoria se queda en la PGJ: Godoy. A pesar de que las hipótesis sobre el móvil del doble asesinato incluyen lavado de dinero, la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México (PGJCDMX) continuará con el caso del ataque en la Plaza Artz Pedregal por tratarse de un homicidio doloso.

Ernestina Godoy Ramos, titular de la PGJ, explicó que en caso de que las diligencias arrojen que la doble ejecución de Benjamín Yeshurun Sutchi y Alon Azulay, corresponde con a móviles de nexos con delincuencia organizada, será remitido un desglose a la Fiscalía General de la República (FGR).

“Por el momento, vamos a investigar el tema de homicidios. Si hay alguna otra línea que lleve a delincuencia organizada, pues entrará la fiscalía, le daremos desglose”.

Aunque dijo que hasta el momento “no parece” haber injerencia del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), se mantiene abierta esta línea de investigación.

Al ser consultada por el tipo de intromisión de la mafia israelí, comentó: “¿Fue lo que dijeron verdad?, no. Vamos a investigar el homicidio, ya estamos en coordinación con la embajada, con sus responsables de seguridad, que en caso de Israel, tiene su responsable en Colombia y estamos en contacto con ellos”, expresó.

EL UNIVERSAL dio a conocer el viernes que los agentes de la Policía de Investigación de la PGJ tienen dos hipótesis: una es la lucha entre grupos criminales de Israel y la otra involucra al Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG).

Con el avance de las indagatorias en lo local, se sigue una línea de investigación sobre los nexos que Benjamín Yeshurun Sutchi tuvo con George Khouri Layón, El Koki, quien está en el Reclusorio Oriente, donde también se encuentran recluidos los líderes de La Unión Tepito, por el asesinato de Eduardo Salazar Bracamontes.

En tanto, los cuerpos de los dos israelíes fueron entregados a sus familiares cerca de la medianoche del jueves pasado, según informó el Tribunal Superior de Justicia (TSJ); sin embargo, a través de un comunicado, la embajada de aquel país dijo que serán repatriados entre el domingo y lunes próximos.

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