A poco más de 7 meses de las elecciones de 2018, los diputados de la Asamblea Legislativa exhibieron que su mente ya está puesta de lleno en esos comicios, pues abundaron los amagos de Morena y de las bancadas del PRD y PAN de medir fuerza en las votaciones, a pesar de que su tarea ayer era aprobar la Ley de Reconstrucción para atender a los damnificados del sismo del 19 de septiembre pasado.

Las descalificaciones y acusaciones de mentir a la ciudadanía surgieron al por mayor en el pleno del recinto de Donceles, el cual estuvo cercado desde la mañana por manifestantes de Morena y damnificados del sismo que también bloquearon la vialidad.

La sesión convocada para las 11:00 horas se realizó cuatro horas más tarde, cuando las comisiones unidas aprobaron un dictamen que estuvo atascado casi un mes por la demanda de Morena de que la reposición de viviendas se haga totalmente a “fondo perdido” por parte del gobierno capitalino.

El primer pique surgió entre el diputado de Morena David Cervantes y el presidente de la comisión de Gobierno, el perredista Leonel Luna; el primero acusaba que “no se tomó en cuenta a la ciudadanía en el dictamen”, además que se “endeudará” a los damnificados y sólo se beneficiará a los inmobiliarios e incluso señaló que no hasta ayer no se conocía el dictamen definitivo.

Luna Estrada reviró al morenista que si no conocía el dictamen era por no participar en las comisiones y que sus quejas “evidencian ignorancia y no haber leído el dictamen”, pues defendió que los mecanismos previstos en la norma permitirán a los damnificados no gastar en la reconstrucción.

El dictamen final se circuló hasta cerca de las 15:00 horas cuando la discusión se trasladó al pleno.

Ahí Morena presentó mociones suspensivas para evitar la discusión de las leyes de reconstrucción y de sustentabilidad hídrica, pero dichas mociones se desecharon.

La diputada Aleida Alavés, acusó que ambos dictámenes favorecían a la iniciativa privada, pero una y otra vez fue señalada por diputados del PRD como Mauricio Toledo y PAN, José Manuel Delgadillo de “tener en el síndrome de la Chimoltrufia, porque como dice una cosa, dice otra”.

Delgadillo hasta le ofreció clases de Derecho, Alavez le respondió que entonces él se fuera a una escuela y enojado, Delgadillo respondió “y usted váyase a… vender” y no concluyó su frase.

La tensión por las leyes a discutir se trasladó a lo electoral. La diputada perredista Elizabeth Mateos echó en cara a los morenistas de creerse la principal representación del pueblo cuando en la ALDF hay 10 bancadas.

César Cravioto, líder parlamentario de Morena, señaló que ganarán la ciudad por lo que dijo: “ya veremos en las urnas cuál es la respuesta de la gente”, y atizó al calificar como “inútil” la administración de Miguel Ángel Mancera, lo que le generó diversas interrupciones.

En su turno, Mauricio Toledo, legislador del PRD aprovechó para responder que Morena volverá a perder como le pasó en el Estado de México y dijo que “con el frente (PAN-PRD) les vamos a ganar en las urnas”.

Al final César Cravioto deseó que Mancera le gane al panista Ricardo Anaya la candidatura presidencial para que Morena y su virtual candidato Andrés Manuel López Obrador midan fuerzas en los comicios del 1 de julio de 2018.

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