Se terminó la Cuaresma pero el consumo de pescados y mariscos no disminuye: la primavera es la mejor época para disfrutar de los frutos del mar. Este año, la SAGARPA estimó un consumo de 325 mil toneladas de productos acuícolas durante Semana Santa , cifra que es un indicador del crecimiento de la industria pesquera en México. Actualmente, nuestro país ocupa el tercer lugar con cerca del 80 por ciento de la producción en Latinoamérica, siendo la mojarra y el atún las especies con mayor producción.

No obstante, acercarse al tema por la vía de la cifras es hacerlo con los ojos semi abiertos pues, en la mayoría de las ocasiones, reflejan solo un lado de la realidad. Hoy por hoy, la industria pesquera en México aún emplea prácticas extensivas y agresivas con el medio ambiente, como la sobre explotación, la pesca ilegal o el uso de la pesca de arrastre. De ahí que iniciativas como #PescaPeroBien (que busca incentivar el trabajo de pequeños productores y la mejora en sus prácticas pesqueras) y el Fondo para la Defensa del Medio Ambiente han encontrado gran apoyo en el sector gastronómico y restaurantero pues, además de proteger la biodiversidad marina, permiten que los pescados y mariscos lleguen al consumidor final en el mejor estado posible y formentan un consumo responsable.

Pero el esfuerzo de organizaciónes y pequeños productores solo se completa con la participación del consumidor. Así que procura poner tu granito de arena evitando comprar y consumir ciertos productos de mar durante su respectiva época de veda. Consume otras especies además del huachingango o el robalo; opta por la tilapia de cultivo, proveniente de estados como Chiapas y Sonora, la trucha arcoíris de Michoacán o el jurel de Baja California Sur. Finalmente, en el caso de frutos de mar asegúrate de que provengan de pescaderías sustentables.

Elige el mejor

Al comprar pescados y mariscos , revisa la firmeza de la carne y la transparencia en los ojos, éstos no deben presentar manchas rojas. Los productos deben oler a mar, por lo que si percibes un olor de amoniaco quiere decir que su pesca se hizo incorrectamente; revisa que las agallas estén rojas y firmes. Por último: aprovecha todo el pescado, no compres únicamente filetes. Utiliza los huesos y la cabeza para hacer un rico caldo de mariscos.

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