Mérida

.— Han transcurrido cinco años tras esa amarga experiencia , "ya no duele como antes pero permanece ahí" como un recuerdo que la obliga a seguir en su lucha por alertar a otras mujeres para que no sean víctimas de la porno venganza . Incluso, se convirtió en una de las promotoras de la nueva ley en contra de ese delito en Yucatán , que se castigará con cárcel.

Ana Baquedano Celorio

, de 23 años, cuenta su historia: cuando tenía 17 años aceptó tomarse una foto con el dorso y pecho desnudo y enviársela a quien en ese momento era su novio , sin saber que tiempo después esa fotografía sería difundida sin su permiso , lo que devino en burlas, críticas y conflictos para ella y su familia.

Estudiaba Mercadotecnia

y tras la difusión de su foto en redes sociales decidió abandonar la carrera y hasta la Universidad donde cursaba debido al acoso que vivió. Actualmente estudia Sicología.

Después de pasar un proceso terapeútico , se reencontró con quien difundió la fotografía sin su auorización y este negó haberlo hecho.

“No le guardo rencor a nadie, logré superar el hecho y tuve el apoyo de mi madre y mis hermanos, de gente que entendió la situación y me respaldó”, relató a EL UNIVERSAL.

Se considera una mujer emprendedora con deseos de evitar que más mujeres pasen lo que ella. Es conferencista y promotora , dentro del programa Escudo Yucatán del gobierno local, que alerta sobre el acoso , hostigamiento y la porno venganza.

Recientemente el Congreso local aprobó que la porno venganza sea considerada un delito penado con hasta cinco años de cárcel. Esto aplicará para quien publique, difunda o exhiba sin consentimiento , imágenes, textos o grabaciones de contenido erótico, sexual o pornográfico de otra persona.

En caso de que la persona responsable de difundir este material sea conyuge, concubina o mantenga una relación sentimental con la víctima, la pena podría aumentar.

La iniciativa de Ley estipula una multa de 200 a 500 Unidades de Medida y Actualización; así como una reconceptualización en el Código Penal para incluir términos como sexting .

Ana sostiene que esta Ley es un avance importante para la protección de las mujeres sobre lo que ocurre en redes sociales y en otros medios.

Afirma que mediante las pláticas que brinda colabora y “aporta su granito de arena” para prevenir este delito.

Para ella, lo ocurrido es parte de una experiencia que al final del camino la llevó a ser una persona, “madura, profesional y con futuro”.

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