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La Fiscalía General de Morelos y la Comisión Estatal de Seguridad (CES) descartaron el móvil del secuestro en el homicidio del empresario Rafael Arámburu Hernández, cuyo cuerpo fue encontrado el jueves en el acotamiento de la carretera federal de Taxco, Guerrero.

Para sustentar su hipótesis difundieron un video tomado por las cámaras del C-5 Morelos, que siguieron la ruta del empresario morelense el miércoles 6 de septiembre, desde las nueve de la mañana hasta las 15:08 horas cuando cruza la caseta de Taxco, Guerrero, acompañado de una mujer.

De acuerdo con la CES, el empresario acudió ese día a un restaurante alrededor de las 09:00 horas; de ahí salió casi dos horas después y 20 minutos después, dice la dependencia, el empresario subió a una mujer entre la avenida Morelos y Leandro Valle.

Con ella circula varias horas por el centro de Cuernavaca hasta que decide salir a la autopista Cuernavaca-Acapulco y después tomar la carretera federal hacia Taxco, Guerrero. La última imagen que se tiene del auto es cruzando la caseta de Taxco.

Su cuerpo fue localizado al mediodía del jueves en el kilómetro 149 de la carretera federal Taxco-Cuernavaca con varios impactos de bala y en el lugar se localizaron nueve casquillos percutidos calibre 9 milímetros.

El sábado, la Fiscalía General de Justicia de Morelos difundió la ficha oficial de búsqueda y por la tarde el titular de la dependencia Javier Pérez Durón confirmó el deceso del empresario.

El fiscal enfatizó ayer que la familia del empresario reportó su desaparición tres días después de su desaparición, por lo que descartó que su asesinato esté relacionado con un presunto secuestro. Según Pérez Durón, la familia reportó la ausencia de Arámburu Hernández hasta la madrugada del pasado sábado.

Pérez Durón aseguró además que el cuerpo de Rafael Félix no estaba maniatado, incluso, abundó, lo encontraron con sus pertenencias, alhajas, dinero y cartera. El automóvil donde viajaba el empresario no ha sido encontrado aún.

Piden intervención de PGR. Javier Arámburu Hernández, hermano del líder empresarial asesinado, pidió la intervención de la PGR para investigar el caso luego de que, en su opinión, las fiscalías de Morelos y Guerrero “eludieron responsabilidad en las indagatorias”.

Al mediodía de ayer, el féretro del abogado fue llevado hasta el restaurante de su propiedad, enclavado a unos 30 metros de palacio de gobierno, en el centro histórico de Cuernavaca. A su arribo, personal del local y comercios aledaños portaron pancartas de despedida.

Desde ahí diversas organizaciones como la Barra de Abogados de Morelos, la Organización de Jueces Jubilados y del Consejo Ciudadano, entre otras, manifestaron su pesar por los 27 asesinatos de homólogos durante el actual sexenio, sin que uno solo haya sido resuelto.

Javier Arámburu rechazó las declaraciones del comisionado de Seguridad Alberto Capella, sobre los presuntos viajes tres veces por semana de la víctima a Guerrero.

“¿Cómo sabe esto el comisionado Capella? ¿Acaso investigaba a mi hermano para decir tales cosas? A mi hermano lo privaron de su libertad en Cuernavaca, aquí se cometió ese delito para después asesinarlo de ocho tiros en la espalda en las inmediaciones de la ciudad de Taxco”, reclamó el hermano del empresario.

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