Uruapan.— César Arturo Valencia Caballero, presidente municipal de Aguililla, Michoacán, fue asesinado ayer a tiros, confirmaron autoridades del ayuntamiento local.

Los reportes señalan que el alcalde estaba a bordo de su camioneta, afuera del campo de futbol de la cabecera municipal, cuando un sujeto lo acribilló. El cuerpo quedó dentro de su vehículo a media calle.

Horas antes, Valencia Caballero, del Partido Verde Ecologista de México (PVEM), sostuvo una reunión con funcionarios del gobierno federal.

El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, condenó el asesinato y envió condolencias a la familia.

“Condenamos enérgicamente el asesinato del alcalde de Aguililla, César Arturo Valencia Caballero. He girado instrucciones para que se investiguen a fondo los sucesos, se esclarezcan a la brevedad y se castigue a quienes resulten responsables”, escribió en Twitter.

“Vamos a pedir de manera muy tajante al gobierno federal y estatal que pronto puedan dar con los responsables. Estamos consternados”, dijo por su parte Ernesto Núñez Aguilar, dirigente en Michoacán del PVEM.

El párroco de Aguililla, Gilberto Vergara García, envió un mensaje desde el lugar del crimen: “Estoy aquí, junto al cuerpo de César. Es un acontecimiento realmente lamentable. Venía en un vehículo de la presidencia; venía solo y al parecer lo detuvieron, seguramente gente armada, a platicar con él, y lo balearon”, dijo.

“¿Que no nos maten a nosotros?”

Un habitante se dijo con miedo de vivir en ese municipio. Consideró que el asesinato del presidente municipal es un ajuste de cuentas de los grupos del crimen organizado.

El poblador, quien pidió el anonimato por seguridad, reconoció que en Aguililla regresó la tensión y temor.

“Si matan al alcalde, con todo y el gobierno [Guardia Nacional y Ejército] que hay, ¿que no nos maten a nosotros?”, cuestionó.

Apenas el pasado 10 de febrero, elementos del Ejército Mexicano, Guardia Nacional y Policía Michoacán ingresaron a éste y otros tres municipios de Tierra Caliente —Tepalcatepec, Coalcomán y Chiniquila—, que habían estado bajo el control y asedio del CJNG.

Fuerzas federales y estatales se hicieron cargo de la seguridad de Aguililla, lo que tenía tranquilos a los habitantes.

Es el segundo alcalde asesinado en Michoacán este año. En este sexenio, 16 han sido abatidos en todo el país.

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