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Todas las semanas el tráiler de la producción de ¡Pásele, yo invito! hace parada en las delegaciones de la Ciudad de México.

En sólo unas horas el vehículo se transforma en un gran escenario desde el que Coque Muñiz invita a los vecinos del lugar a pasar un rato agradable escuchando música en vivo, viendo un poco de comedia y participando en concursos.

El formato se estrenó el pasado 14 de mayo y para Coque el reto es ir creando su público poco a poco hasta volverse un referente en la ciudad.

“No es un proyecto fácil. Tenemos la suerte de estar en un canal nuevo (a+ 7.2), estamos luchando contra la tradición y el gran reconocimiento que tiene el país de sus canales favoritos. Un solo punto de audiencia para nosotros es oro. Yo no creo que de la noche a la mañana se construya algo, lo que vale la pena es lo que hemos ido conociendo”, dijo durante una de las grabaciones en Xochimilco.

En su opinión, el programa (que se transmite todos los días de 16:00 a 18:00 horas) vuelve a la raíz de la tv: entretiene a la gente que quizá no tiene el suficiente dinero para pagar por un espectáculo y fomenta la convivencia entre los habitantes.

“No nos metemos en cuestiones políticas, cada delegación es una ciudad y tiene cosas buenas y malas pero tiene muchos atractivos para el público que te ve en provincia, además, la familia se une a través de los barrios, saben dónde están los mejores tacos, donde está la peluquería”.

La parte del humor está a cargo de Huarachín y Huarachón.

“Llevamos 35 años trabajando en tv y aceptamos estar aquí porque Coque es el conductor más carismático”.

Aunque les toca hacer el programa en medio del calor, la lluvia y el frío, para el conductor vale la pena.

Además, dijo que le gustaría que ¡Pásele, yo invito! saliera de la ciudad para recorrer otros estados.

“Estoy seguro que es lo que vamos a hacer próximamente, tenemos un escenario móvil” .

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