Cubrebocas, careta, un traje de cuerpo completo, toallitas desinfectantes, sanitizante… y todo lo necesario para mantener seguro al público fue lo que el actor integró a su monólogo "Puras cosas maravillosas" en su regreso a las funciones presenciales este martes.

Para el histrión, cuyo montaje se presenta en el escenario del Teatro Milán, era necesario no perder el contacto con el público pero a la par tener la certeza de no exponerlos al Covid-19.

"No tengo manera de agradecerles que estén aquí, tenía muchas ganas de regresar a hacer esta obra. Lo más importante es que se sientan seguros, se trata de hacer que la gente salga, regrese a sus actividades y una de ellas es el teatro porque hay mucha gente que vive de esto", señaló al finalizar la función de prensa.

"Lo más importante, si íbamos a regresar, era hacerlo de una manera segura y cumpliendo con todas las normas, en el teatro Milán y Foro Lucerna s iempre hemos sido muy rigurosos", reiteró.

El montaje invita a apreciar las pequeñas cosas de la vida a través de la historia de un niño/adolescente/ adulto que hace una lista de cosas maravillosas. A la vez que habla sobre una problemática como el suicidio.

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La puesta en escena sufrió algunos cambios que la hacen más actual por la aún presente pandemia por lo que además de elementos como el cubrebocas, Perroni interactúa a la distancia con el público y tratando de no tocar a nadie haciendo uso de spray desinfectante y bolsas de plástico para tomar objetos.

El histrión agradeció que aún con los cambios no se perdiera la esencia de la historia.

"Es una obra que necesita de ese contacto, por eso nunca quise hacerla en streaming… quería hacer algo que fuera adecuado a estos tiempos, que el público no se sienta invadido o en peligro. Es mucho trabajo".

Perroni considera que ya hay mucha gente que está lista para volver a los escenarios en los que actualmente se permite el 40% de aforo. Sin embargo aún falta un camino qué recorrer en la reactivación del entretenimiento en la Ciudad de México.

"Estamos esperando que el aforo suba porque sí es muy castigado, por un lado es un gran avance y por otro no es nada", apuntó.

Además compartió que se debe hablar sobre el tema de la salud mental y el suicidio pues sigue siendo un tema que no se toca. A través de lo que sabe hacer, el teatro", es que ha encontrado la forma de hablarlo.

"En este punto de nuestra vida, todos hemos pasado por algún momento en donde nos hemos sentido así, si no una terrible depresión que requiera de terapia sí muy tristes y sin saber cuál es el sentido", comentó.

"Esta pandemia vino a cuestionarnos muchas cosas y a que podemos tocar fondo, no creo que haya una persona que no se haya sentido así y que tenga alrededor historias. Es algo de lo que tenemos que hablar, la salud mental, es una realidad y los números son terribles".

Reflexionando sobre el título de la obra contó que para él su hija está en el número 1 de su lista de cosas maravillosas mientras que su familia en el segundo lugar y el teatro en el tercero.

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