El caso de , la soldado procedente de una familia migrante mexicana, quien fue asesinada a golpes en la base militar de Fort Hood en 2020, está en la mira de .

La actriz de Mujeres desesperadas, y Moisés Zamora, creador de Selena, la serie, están trabajando para poder llevar a la pantalla esta historia ocurrida en abril de ese año, cuando prácticamente la pandemia por Covid-19 inundaba las noticias internacionales.

Whistleblower, palabra que hace referencia a la persona que informa sobre una irregularidad, es el título por el momento del concepto.

“Es un proyecto en desarrollo”, dice brevemente Zamora, “si se logra por ahora, ella está como productora y yo como showrunner”.

Vanessa Guillén desapareció el 22 de abril de 2020 de la base militar ubicada en Texas y sus restos fueron encontrados dos meses después.

Fue muerta por otro militar a quien ella ya había reportado como acosador y quien se suicidó cuando iba a ser capturado.

La familia de la soldado acusó de negligencia a las autoridades militares estadounidenses, pues no le reportaron la desaparición sino hasta que se conoció el caso en los medios de comunicación.

Tras una investigación del Congreso estadounidense, se despidió a 14 mandos del ejército de ese país y se reveló que durante 2020, al menos una treintena de muertes habían ocurrido en la base, ya fuera por suicidio, homicidio o accidente.

“La historia tuvo un final bueno, puede decirse, porque se logró que los crímenes violentos de este tipo no fueran juzgados por una corte militar, porque al final ellos mismos se juzgaban, sino por lo civil”, comenta Zamora.

El entrevistado es reconocido en el ámbito audiovisual por haber sido el creador de Selena, la serie, que de acuerdo con Netflix fue vista por 25 millones de personas.

También fue autor de un episodio de la animación Star Wars: the bad batch y otro de la ficción American crime.

Recientemente presentó la plataforma de streaming Videomart, en la que los usuarios pueden comprar y vender películas digitales.

Entre su contenido, con cerca de 100 producciones mayoritariamente en español, se encuentra en exclusiva la cinta de El Santo en Los leprosos y el sexo.

“Es una plataforma que es como un mercado donde el usuario tiene la posibilidad de comprar una película y tenerla como propiedad. Pero en lugar de quedarse en esa plataforma su acceso digital, como se hace en otras, la va a poder vender a otro usuario, dentro de la misma plataforma, y con eso crear un segundo mercado. Y los creadores van a ser partícipes de esas ganancias”, explica Zamora.

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