¿México tendrá la capacidad para un candidato disruptivo?, ¿para una persona que no quiera destruir el sistema con ideas irrealizables, sino replantearlo y reconstruirlo con un claro objetivo de justicia social hacia las víctimas del mismo?

En el mundo se urde un gran debate entre las propuestas disruptivas, que no vienen del sistema per se, como Emmanuel Macron y las propuestas destructivas, que plantean, de forma irrealizable en la práctica, el cambio estructural por completo del sistema de gobernanza, como Donald Trump.

Por el momento, al menos yo, no encuentro a un candidato disruptivo mexicano, claramente veo al destructivo o antisistema en la figura de Andrés Manuel López Obrador, pero el antisistema perdió su vigencia tan rápido como Trump cometió sus primeros errores y los electores del Brexit terminaron arrepentidos de haber volcado sus frustraciones, a veces hasta de índole personal, en las urnas que luego acabaron por echarlos de una patada de la Unión Europea.

Si Gran Bretaña cometió un error con la propuesta destructiva, ¿qué podemos esperar de un electorado como el mexicano que urge en deseos de una hoguera donde se derrita por siempre la mafia del poder aunque esto conlleve al nacimiento de una mafia nueva?

La ausencia de una propuesta disruptiva, que logre identificarse con una gran parte de los mexicanos y al mismo tiempo tenga un claro distanciamiento del sistema se antoja utópica en el escenario político.

Si nos atenemos a la mayoría de las encuestas, veremos a una Margarita Zavala o un Ricardo Anaya o a un Moreno Valle, aliados con un PRD determinante, pero no por ello menos satelital, que apenas arañan al candidato de Morena, al antisistema.

Es claro que en la siguiente elección, el “sistema” representado por el PRI, tendrá pocas o nulas probabilidades de mantener la Presidencia de la República, el arrastre de la baja popularidad y los errores constantes en su comunicación lo han llevado a la lona antes de que siquiera suene la primera campana.

Pero un candidato panista/perredista también es parte del sistema, en el fondo cambia únicamente el color y las siglas, porque las propuestas económicas, políticas, sociales, de seguridad y de justicia no han surgido como una novedad de nada… escuchamos, eso sí, un patético concurso del más corrupto contra el menos ratero en todos los discursos políticos y sobre todo, somos testigos de algo muy patético: la falta de solvencia moral en todos.

Aún es tiempo de que surja un candidato disruptivo, habrá que buscar bajo las piedras.

DE COLOFÓN.— ¡Son unos genios!, dura casi cinco minutos el video y el candidato no se percibe cercano… pero al menos se atrevieron a hacer algo.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses