Tras la final, el arbitraje queda marcado por una jugada dentro del área en los últimos minutos del juego. Penalti muy claro sobre Sosa y Santander estaba bien colocado para sancionarlo.

Pero no sólo fue esa jugada, sino los últimos 30 minutos del duelo en los que vimos una terrible falta de personalidad.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses