Esa familia no la tiene ni Obama

Esa familia no la tiene ni Obama

Por allá de los primeros días de marzo, Arturo López Obrador salió en público a apoyar al candidato del PRI al gobierno de Veracruz, Héctor Yunes Landa, situación que su hermano Andrés Manuel criticó con un “hasta en la familia hay traidores”. Don Arturo reviró con un “AMLO es un tirano”. El ex candidato presidencial comenzó a cuchichear entre sus cercanos que ya no se presentaría ni en las fiestas ni en los velorios familiares para no ver a su hermano Arturo. “Ya no tengo hermano”, soltó desde entonces muy dolido por el hecho de que su sangre estuviera del lado del priísmo veracruzano. Pero AMLO explotó este jueves, un día después de que Arturo participara de un video para refrendar su apoyo a Yunes Landa: “En la familia siempre hay alguien que desentona, que le gusta acomodarse”. Andrés Manuel hizo en público su enfado y luego vino la mofa de que “esa familia no la tiene ni Obama”.

El sueño panista

A poco más de una semana de las elecciones, en el PAN están entusiasmados con dos cosas. La primera, nos aseguran algunos panistas, es que, según los datos de encuestas propias, se están acercando a un escenario que, sinceramente, muchos no veían posible. Dicen que sus cifras muestran que tienen posibilidades reales de tener tres gubernaturas, de las 12 que están en juego, Y la segunda es que esas mismas encuestas les permiten vislumbrar que el PRI no alcanzará las nueve gubernaturas que se puso como meta el presidente del partido tricolor, Manlio Fabio Beltrones. Sin embargo, algunos panistas más serenos aseguran que no hay que echar aún las campanas al vuelo pues, primero, las mediciones son encargadas por el propio PAN, y segundo, en algunos casos los puntos de ventaja que dan a los candidatos azules están muy cerca del margen de error de las encuestas, por lo que consideran que sus compañeros que sueñan con las tres gubernaturas deben estar también preparados en caso de que se vuelva una pesadilla.

Sin avance, las bodas gay

Mucho más complicado de lo que aparenta está el debate en el Congreso sobre la iniciativa del presidente Enrique Peña Nieto para los matrimonios igualitarios —las bodas gay—. Nos dicen que los grupos parlamentarios del PRI y del PAN no encuentran una buena razón en este momento para procesar la discusión y los dictámenes para darle salida a la propuesta del Ejecutivo, que también incluye la posibilidad de adopción. Legisladores de ambas bancadas se formulan preguntas sobre la pertinencia, en primer lugar, de aprobar los matrimonios entre parejas del mismo sexo. Pero el tema se complica más cuando dialogan sobre la adopción. ¡Ave María Purísima!, se persignan algunos diputados y senadores.

Guerrero, urge un rescate

El gobernador de Guerrero, Héctor Astudillo Flores, no puede negar que la entidad que gobierna se encuentra en una grave situación de inseguridad, porque algunas policías municipales trabajan para el crimen organizado. Y si volteamos al puerto de Acapulco, la situación es crítica. Nos comentan que los empresarios siguen bajando la cortina porque no tienen suficientes recursos para pagar impuestos y la “cuota”, la extorsión, a los grupos del crimen organizado. Algunos sugieren que un comisionado, como en Michoacán, sería una alternativa para levantar Guerrero y que la Federación asuma la vigilancia por completo en esos puntos frágiles. Don Héctor se escuda con un “los medios exageran”.