Hete aquí que están proliferando traficantes del combustible que con sólo trasladarlo fuera del ámbito beneficiado obtienen ganancias inauditas en perjuicio del fisco. Mercado negro de gasolinas.

Se calcula que en los pocos meses de vigencia de la medida se dejaran de recaudar al menos mil 500 millones de pesos de IEPS.

El tráfico se realiza desde un esquema hormiga, tanque lleno de vehículos, hasta la carga de tambos o de plano pipas.

Mientras en la “línea” se vende el litro de Magna en 8.10 pesos, en el resto del país el costo es de 13.16, por más que el documento presidencial y otro expedido el mismo día por el secretario de Hacienda, Luis Videgaray, hablaban de “ajustes” periódicos para evitar desequilibrios.

El diferencial no cambia por escalamiento, es decir que el producto se encarezca a medida que se aleja la frontera… y con ello la tentación.

En el escenario del mercado negro el traslado de mil litros al día de gasolina podría dejar una ganancia de entre 3 mil 500 a 3 mil 800 pesos a un coyote. Si el transporte se realiza en pipa, éste puede generar una utilidad de 150 mil pesos por unidad.

Si el negocio lo hicieran las propias gasolineras su margen o comisión saltaría de 92 centavos a entre 3.91 a 6.92 por litro. Naturalmente, éstas están fuera de la jugada.

En la magia del negocio fácil, moviendo las gasolinas 350 kilómetros en una proporción de 300 mil litros al mes, se tendría un margen de dos millones 76 mil pesos, es decir 10 veces más allá del normal.

El fenómeno es comprobable si se revisan las altísimas ventas de los expendios de la franja, en comparación con los puntos alejados de ella. La población, pues, se surte en el mercado negro.

La incidencia mayor se ubica en Coahuila y Tamaulipas.

El escenario plantea un cúmulo de violaciones, ya de carácter fiscal, ya de competencia económica, de transporte de productos peligrosos sin la previsión de ley, además de atropellar los contratos de franquicias de Pemex.

Naturalmente, los “coyotes” que surgieron a la vera del río revuelto se mueven en la economía informal, mientras los franquiciarías están sujetos a reglas que oscilan desde mantenimiento permanente en los tanques, adquisición de hardware y software autorizados por Pemex, y calibración de equipos de bombeo.

Lo grave del caso es que no hay investigación sobre quiénes y bajo qué artes surten las pipas pirata o los tambos que se trasladan en camionetas. Tampoco hay una indagación sobre la forma en que se vende el combustible, a riesgo de provocar accidentes ante la falta de equipos adecuados.

El problema podría agudizarse con la libre importación de gasolinas, por más que sólo pueden hacerlo aquellos que reciban una autorización previa dado que el combustible que ingresa a la frontera norte podría omitir el pago del Impuesto Especial sobre Productos y Servicios si se destina a la franja fronteriza.

La puerta, pues, está abierta para la simulación. Bajó el precio de las gasolinas con la varita mágica de la reforma energética… para los “coyotes”.

Negocio redondo.

Balance general. En la gravedad de la emergencia provocada por un señalamiento de la Comisión de Valores de Estados Unidos sobre una posible alteración de sus estados financieros durante 2009 y 2012, la desarrolladora de vivienda Homex envió un equipo directivo a Nueva York, en afán de impedir una demanda civil o un proceso administrativo.

En el entretanto tomó la dirección general el presidente del Consejo de Administración, Eustaquio de Nicolás.

El punto fino que se indaga es si la firma adoptó desde 2009 una regla contable para empresas del ramo que entró en vigor un año después, en cuyo escenario ya no se reconoció como tales algunos ingresos.

Esto implicaría que no se reflejó correctamente la salud de la compañía de cara a los inversionistas que le apuestan a su acción. La firma ha negado cualquier irregularidad.

Sigue el embargo. Colocada en ruta la posibilidad de imponerle a determinados productos procedentes de Estados Unidos un arancel extraordinario para cubrir una suerte de indemnización por los daños provocados a empresas productoras de atún por el embargo decretado en el país del norte aduciendo supuestas razones humanitarias, la contraparte ya logró un freno.

A solicitud del Departamento de Comercio del país vecino la Organización Mundial de Comercio está convocando a un panel de expertos para evaluar el cumplimiento de una resolución que ordenaba destrabar el embudo.

Este, como usted sabe, consistía en la exigencia de obtener un pegote con la leyenda “Delfines a salvo”, para colocarlo en las latas de atún que llegaran al mercado. El requisito era misión imposible.

Según algunas organizaciones no gubernamentales de Estados Unidos, durante la pesca de la especie, realizada con redes circulares, se atrapaba a delfines que nadaban a la vera de los bancos, a los que después se mataba a palos.

La reclamación de México alcanza 472 millones de dólares.

Coparmex priísta. Tradicionalmente panista, la Coparmex, al menos su delegación en Quintana Roo, le está dando un espaldarazo al candidato priísta Mauricio Góngora.

El sindicato patronal ofreció su respaldo al programa planteado por el aspirante, que entre otras cosas habla de reducir la tramitología para crear nuevas empresas, reduciendo a tres los de nivel estatal.

La promesa habla también de obras de infraestructura, simplificación administrativa y mayor promoción turística.

Del otro lado del ring está Carlos Joaquín, hermano del secretario de Energía, Pedro Joaquín Coldwell, quien ya fue gobernador.

Van contra aerolíneas. La Comisión Permanente del Congreso aprobó un punto de acuerdo para exhortar a la Secretaría de Comunicaciones y Transportes a redoblar la vigilancia sobre las líneas aéreas. El abanico habla de tarifas elevadas por supuesto monopolio de rutas; de vuelos demorados sin explicación al calce; de sobreventa de boletos y demora en la entrega de equipaje.

Durante 2018 el promedio de aterrizajes y despegues fuera de horario fue de 38%.

GNP social. En su compromiso con la comunidad la compañía de seguros GNP ha impulsado una campaña de donación de órganos a cuya vera se aumentó 50% el número de personas que se comprometen a permitir extracciones después de su muerte.

La garantía es una pulsera donada por la empresa.

En paralelo, GNP ha promovido 591 operaciones de cataratas y 71 de trasplantes de córnea realizadas en el Hospital de la Luz.

La compañía patrocinó 250 becas para Técnico Optometrista.

albertobarrancochavarria0@gmail.com

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