Se acabaron a Pemex

La entonces paraestatal era tristemente celebre en el planeta por la forma peculiar de cerrar la posibilidad de contratos en bares, restaurantes u oficinas alternas, donde se negociaba la comisión.

A excepción de un puñado de personajes, por ejemplo Luis Ramírez Corzo, la empresa fue dirigida por políticos cuyo principal mérito era la amistad con el Presidente de la Republica.

Durante el mandato del ex gobernador de Coahuila, Rogelio Montemayor Seguy, se dio el famoso Pemexgate, es decir el desvió hacia la causa priísta de un formidable apoyo al sindicato.

Durante el gobierno de Vicente Fox las órdenes de colocación en mandos superiores llegaban desde Los Pinos.

“La corrupción, negligencia y abusos atentaron contra la empresa, sentencio, tajante, el presidente del Consejo Coordinador Empresarial, Juan Pablo Castañón.

Aunque las graves pérdidas de Pemex, 462 mil millones de pesos el año pasado, se justifican por la caída dramática en el precio internacional del petróleo, en las vacas gordas, cuando el barril de la mezcla mexicana llegaba a 100 dólares, el escenario era idéntico.

En el lapso 2001-2006, la empresa acumuló un remanente de ingresos, es decir la diferencia entre el precio presupuestado y el real, de 450 mil millones de pesos… que se esfumaron en gasto corriente del gobierno.

De pronto en Gobernación había 11 subsecretarios.

Los recursos debieron apuntar a la exploración, dada la caída dramática en la producción del yacimiento estelar, Cantarell, de la Sonda de Campeche.

Pemex lleva 11 años al hilo de contracción en su producción.

Tampoco se apuntó a la construcción de nuevas refinerías, con la novedad de que las que se reconfiguraron y modernizaron en el sexenio zedillista derivaron en farragosos litigios internacionales por complicidades al interior de la empresa con los contratistas.

El saldo contabiliza la exigencia de importar la mitad de las gasolinas que consume el país.

Aunque el pasivo laboral de la empresa creció 100 por ciento en los últimos cinco años, fue hasta el pasado cuando se planteó una modificación al esquema de jubilaciones y pensiones… que resultó apenas un sancochado.

La cuesta alcanza 1.2 billones de pesos, casi 7% del Producto Interno Bruto.

En paralelo, como usted sabe, Pemex enfrenta deudas con bancos e inversionistas que le apostaron a sus papeles por 86 mil millones de dólares.

La calificadora de deuda Moody’s rebajó su calidad crediticia de A3 a BaaI, lo que se traduce como exigencia de enfrentar réditos más altos.

De hecho, en la última emisión Pemex debió pactar intereses dos puntos por arriba de los que se le imponían normalmente.

El problema es que la debacle de la empresa arrastra las cuentas del fisco, dada la dependencia de éste en el 30 por ciento de la recaudación; golpea al empleo en el sureste del país; coloca en riesgo la calidad crediticia de la deuda soberana del país, y según la calificadora Moody’s, pone en riesgo a los bancos de desarrollo que le permitieron una bocanada de oxígeno.

¿Cuánto recuperaría Pemex si se obligara a sus exfuncionarios a regresar el botín?

Se acabaron a la principal empresa del país.

Balance general. A contrapelo de las objeciones de la oposición, el Senado aprobó por mayoría en comisiones una serie de reformas a la Ley de Asociaciones Público-Privadas que le abre la posibilidad a inversiones mixtas en infraestructura.

Bajo el esquema, por ejemplo, se construyen cuatro penales de alta seguridad en el país, además de 16 hospitales y algunos entronques de carreteras.

El problema es que se consideró que el dictamen que llegará hoy el pleno no plantea contundencia para evitar distorsiones que pudieran generar conflictos de interés.

A imagen y semejanza de los famosos Pidiregas, es decir proyectos de impacto diferido en el registro del gasto que utilizaban Pemex y la Comisión Federal de Electricidad, el sector privado financia el costo de la construcción para después cobrarle al gobierno en partidas anuales.

La posibilidad, en el caso de las hoy empresas productivas de Estado, era cubrir los abonos con los ingresos derivados de las obras, lo que no empató con la realidad.

No, pero sí. En un capítulo más de suspenso, Petróleos Mexicanos suspendió por octava ocasión el sí o no a un contrato para suministro de 91 mil equipos de cómputo por un monto de mil 600 millones de pesos. La última cita, prevista para el martes, se aplazó para el miércoles de la semana santa.

La firma que había planteado la oferta más baja tiene como razón social Soluciones Tecnológicas, cuyo socio es Joel Granados.

La razón del tributo, al margen de la precaria situación de la empresa productiva de Estado, es que la moda actual en el gobierno federal es arrendar no solo bienes muebles sino equipos.

Sin embargo, de acuerdo con un análisis realizado por una consultora internacional el escenario resultaba menos oneroso para la firma, dado que se incluían compromisos de mantenimiento y reposición.

Puñaladas en el IMSS. Vacante el puesto de Secretario General del Instituto Mexicano del Seguro Social al retiro, por edad avanzada, del ex ministro de la Corte Juan Moisés Calleja, la posición la pelean con ahínco los sectores representados en el Consejo Técnico… con excepción del gubernamental.

En el escenario, finalmente la CTM candidateó a José Luis Carazo, integrante del órgano, quien había perdido la esperanza a la muerte de su protector, Joaquín Gamboa Pascoe. Y aunque originalmente se había dicho que el candidato de la Concamin sería su expresidente Silvestre Fernández, en larga veda de chamba, el presidente del organismo, Manuel Herrera, baraja otras opciones.

A su vez el gallo de la Concanaco es Héctor D’Oporto, quien ha sido su consejero en el ramo. Finalmente la Coparmex candidatea a Jesús Moreno Padilla, integrante de su comisión de salud pública. La designación, de acuerdo a los estatutos del organismo tripartita, la realiza el director general.

Cannig House. Incierto aún el desenlace de la segunda guerra mundial, en 1943, Gran Bretaña estableció una instancia académica conocida como “Canning House”, cuyo cometido era analizar las relaciones entre el Reino Unido y América Latina.

El nombre deriva de George Canning, quien, al amanecer del siglo XIX, en su calidad de ministro de Relaciones Exteriores, apoyó los intentos de independencia de los países del Hemisferio sometidos por España.

El hecho es que el Canning House realiza un seminario de análisis en México de las oportunidades de Gran Bretaña en el sector de energía.

Los ponentes por parte del sector privado mexicano son Gustavo Mohar, del grupo Atalaya, y Jesús Rodríguez Dávalos, de RDA Abogados.

albertobarrancochavarria0@gmail.com