La fiesta del Campeonato FIBA Américas 2015 terminó y en cuanto a lo deportivo tenemos la película perfectamente clara, sin embargo, no hay que dejar en el olvido lo financiero que es de gran importancia y que debería de quedar totalmente claro.

La Conade pagó a FIBA Américas 5 millones de dólares (aproximadamente 85 millones de pesos) por ser sede del torneo, dinero que recibe íntegro el máximo organismo del basquetbol en el continente nada más por “hacernos el favor” de permitirnos organizar el evento.

¿En qué beneficia al deporte mexicano organizar campeonatos como este? ¿Cómo favorece al basquetbol de nuestro país haber vivido 15 días de euforia si no habrá cambios positivos en su estructura? ¿En qué ayuda a los jugadores de la LNBP que siguen sin recibir el dinero que se les adeuda? ¿En dónde quedaron las ganancias y en qué se utilizarán?

En los partidos que enfrentó la selección mexicana, el promedio de asistencia fue de 15 mil espectadores y los ingresos que se generaron en taquilla estuvieron bajo el control del Instituto del Deporte de la Ciudad de México quien ahora tiene la obligación de explicar cuánto dinero se gastó, cuánto se recuperó, cómo se invertirá y analizar si realmente nos trajo un beneficio deportivo y económico.

Organizar eventos suena muy “bonito”, pero siempre debe haber un porqué de fondo, no solamente dejarnos embaucar sobre todo por federaciones internacionales que incluso tratan de intervenir en nuestro deporte y no exactamente de manera positiva como lo ha hecho FIBA Américas a través de su titular Alberto García quien ha decidido por cuenta propia, y por beneficios personales que le implican esa alianza, que Ademeba es la federación mexicana de basquetbol, cuando no es así, cuando Conade es el máximo organismo deportivo de México y es quien debe definirlo a través de unas elecciones conforme a la ley.

¿No se le hace raro que con el desastre que es nuestro basquetbol a nivel organización, en donde no hay una federación bien conformada, FIBA Américas le otorgue la sede de infinidad de eventos continentales a nuestro país? El señor Alberto García lo justifica diciendo que quiere ver florecer este deporte en México, pero ¿cómo? Aliándose con Ademeba y la LNBP quienes más daño le han hecho. Porque el éxito de la selección mayor desde los Juegos de Guadalajara 2011 no es obra de nadie más que del propio equipo, que en este Preolímpico solamente estuvo respaldado por la Conade y algunos patrocinadores, fuera de eso, las selecciones femeniles y menores son un caos en su organización y no existe apoyo para ellas por aquellos que se autonombran los dirigentes del basquetbol.

Se rumora que Conade está dispuesta a solicitar el repechaje del Preolímpico de basquetbol para el próximo año y si las cosas se hacen correctamente, la máxima autoridad de nuestro deporte no tendría por qué gastar un solo centavo en este evento. Así es como debe de ser, porque ya se comprobó que este deporte es muy noble y puede convertirse en un gran negocio. Seguramente los medios de comunicación estarán pegados al equipo nacional día y noche, habrá muchos patrocinadores que no querrán perder la oportunidad de invertir, pero para eso se necesita una buena organización y transparencia para que los empresarios no sientan miedo de destinar recursos a un torneo que puede tener excelentes frutos para todas las partes implicadas, pero sobre todo para los atletas.

Conade debe hacer entender a todos los actores, incluyendo FIBA Américas, COM, Indeporte, Ademeba y LNBP que los beneficios de realizar una justa de esta magnitud los debe recibir la propia Conade que es quien hace la inversión y que las ganancias deben ser utilizadas a favor del desarrollo del deporte en cuestión, no en los bolsillos de algunos que inmediatamente después del silbatazo final simplemente se dan la vuelta y no rinden cuentas a nadie.

Profesor.

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