cultura@eluniversal.com.mx

Amparo Dávila cumplirá 90 años mañana 21 de febrero y lo hará escribiendo, así lo ha afirmado: “Sigo escribiendo. Quiero publicar poemas chiquitos, poemas de ayer y de hoy, luego las semblanzas, que son varias. Una es una semblanza de Pinos, Zacatecas, otra la semblanza de mi muerte”.

La cuentista y poeta que fue esposa del artista Pedro Coronel será celebrada hoy en Bellas Artes, en una mesa de homenaje en la que ella estará presente. La autora de títulos como Tiempo destrozado y Árboles petrificados —con este último ganó el Premio Xavier Villaurrutia en 1977— es considerada una de las más importantes narradoras fantásticas en Hispanoamérica.

Además es una de las narradoras más leídas entre los jóvenes lectores y escritores, para quien es una referencia obligada y ejemplo del género de cuento fantástico. Sobre ese hecho, la cuentista comentó en una entrevista con el INBA: “Me da mucho gusto que los jóvenes escriban literatura de terror o de lo que sea, pero que escriban buena literatura, que no sea a base de pura inteligencia; no creo en la inteligencia pura, yo creo en la sensibilidad, indudablemente”.

Narradores jóvenes como Elena G. Moncayo, Aniela Rodríguez y Jaime Velasco Estrada refrendaron su reconocimiento a la literatura fantástica de Amparo Dávila durante la mesa “Reflexiones sobre el cuento”, organizada por la Coordinación Nacional de Literatura del INBA y celebrada la semana pasada.

Elena G. Moncayo, autora del libro de cuentos La Sequía, dijo que desde su niñez lo fantástico se asomaba, “ella veía a un hombre con una pata de palo pasar por su casa, a una señora con una vela encendida vestida de blanco, vivía cerca de un cementerio y veía cómo la gente de los pueblos cercanos desfilaba para ir a ver a sus muertos. Su hermanito menor de cuatro años muere, cuando ella tenía cinco, y ella se empezó a sentirse sola, creo que todo esto hizo que ella indagara en los aspectos de lo fantástico y lo real”.

Esta noche, a las 19 horas, en la Sala Manuel M. Ponce del Palacio de Bellas Artes, Laura Cázares, Agustín Ramos, Alejandro Toledo y la propia Amparo Dávila se reunirán en el “Homenaje a la cuentista en sus 90 años”, que es la actividad central de todo el programa organizado por la Coordinación de Literatura del INBA, en lo que ha llamado Febrero 2018. El mes de Amparo Dávila.

Ha sido tan emotivo el homenaje, que la propia escritora compartió con la Coordinación Nacional de Literatura un fragmento de un texto inédito titulado “La semblanza de mi muerte”, en el que señala:

“Que no muera un día nublado ni frío de invierno, y me vaya tiritando de frío y de miedo ante lo desconocido, ese mundo de sombras. No, así no. Sin rostro que camina siempre a mi lado o que me aguarda al doblar la esquina. Y ese misterio insondable que no logramos develar y que angustia y perturba la existencia. Quiero irme un día soleado de una primavera reverdecida llena de brotes y de pájaros y de flores, para buscar mi jardín del Edén, mi paraíso perdido y gozar de los frutos de la vid y de la higuera, el perfume de los cerezos y los naranjos en flor, el calor del sol que no se oculta nunca”, escribió.

La celebración por los 90 años de Amparo Dávila, que inició el pasado 12 de febrero con el curso “Amparo Dávila y la literatura fantástica” —impartido por la escritora Alejandra Amatto, donde se ofrece un panorama interpretativo de carácter general sobre la literatura fantástica en México a lo largo del siglo XX y examina su narrativa— concluirá el próximo 28 de febrero con una segunda mesa de reflexión sobre el cuento y Amparo Dávila.

En esa segunda mesa, que se llevará a cabo a las 19 horas en la Sala Adamo Boari del Palacio de Bellas Artes, participarán Julieta García, Iliana Vargas y Fernando de León.

Un día antes, el 27 de febrero, a las 19 horas en el Centro de Creación Literaria Xavier Villaurrutia se realizará una “Lectura colectiva de la obra de Amparo Dávila”.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses