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El escritor David Toscana es el ganador del Premio Xavier Villaurrutia de Escritores para Escritores 2017 por su novela Olegaroy, “porque se trata de una novela inteligente, sabia, con una enorme voluntad de estilo donde las peripecias de los personajes van trenzándose con sorprendente naturalidad y un gran sentido del humor, que no se pierde en los muchos momentos en que la escritura de Toscana alcanza una notable profundidad filosófica”, consta en el acta del jurado, integrado por Felipe Garrido, Silvia Molina y Vicente Quirarte.

“Estoy muy contento por haber ganado, es el premio con más tradición en México. Creo que uno siempre tiene la ambición de obtenerlo algún día. Es un premio para mí, pero es sobre todo para la novela Olegaroy, que tiene un personaje que para mí es muy entrañable. Para mí, la escritura es un acto de comunicación y me tiene muy contento que he sabido comunicarme con los lectores, así como con los tres buenos lectores del jurado, porque de algún modo le dan un buen empujón a mi literatura”, dijo en entrevista.

A través de un boletín, el INBA informó que Quirarte expresó que la novela de David Toscana le sorprendió por su agilidad, su inteligencia y su agudeza, donde el sentido del humor no estorba a la sabiduría. Destacó “el gran conocimiento filosófico que tiene el autor y que transmite a su personaje, quien finalmente es un filósofo que está persiguiendo como lo dice al final de la novela, lo que todos los filósofos persiguen: el todo o la nada”.

Al respecto, Toscana quien radica en España pero se encuentra de visita en México, comentó que la filosofía y las matemáticas fueron temas que detonaron la escritura de Olegaroy. “Siempre he pensado que la novela es un acto filosófico, cuando leemos no nos quedamos en la mera historia sino que siempre nos empezamos a preguntar cosas, de eso se trata la literatura, de cambiar, de cuestionarnos cosas, de intuir más o menos qué razón tiene la vida; la vida, creo, la cuestionamos cuando leemos. Cuando escribí Olegaroy pensé en qué pasaría si escribía una novela en la que esos cuestionamientos estuvieran presentes, que los personajes hagan y digan cosas, pero que el narrador se estuviera preguntando cosas y tratando de llegar a algo más profundo. Mi intención no fue resolver el problema al lector sino llevarlo a un escalón más arriba en la tarea de leer y cuestionar, llevarlo a ser un lector crítico”.

Olegaroy (Alfaguara, 2017) aborda la historia de un hombre de apariencia pequeña que tras el salvaje asesinato de una joven decide tomar la investigación por su cuenta y en el proceso se enfrenta ante las dudas que más inquietan al ser humano desde la antigua Grecia.

“El sentido es mi natural forma de narrar, a veces puede ser oscuro; la muerte también ha sido un tema presente en mi obra, a veces es central y a veces no; otro tema que me interesa es el Monterrey del pasado. Una razón por la que me gusta escribir es por la nostalgia del Monterrey que viví en mi infancia, porque la escritura también es un acto de investigación de ese pasado”, dijo.

El galardón, convocado por la Secretaría de Cultura a través del INBA, en colaboración de la Sociedad Alfonsina Internacional, será entregado el 17 de abril a las 12:00 en la Sala Manuel M. Ponce de Bellas Artes.

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