Un documento de 6 de marzo de 1589 con la firma de Miguel de Cervantes fue hallado en el Archivo de Protocolos Notariales de Sevilla (sur de España) por el investigador José Cabello Núñez , archivero municipal de La Puebla de Cazalla (Sevilla) especializado en documentación cervantina que ya ha localizado tres firmas del autor del Quijote.
Además de este documento con la firma de Cervantes, Cabello Núñez econtró recientemente otros doce documentos inéditos sobre el autor del Quijote y su estancia en la ciudad de Carmona (Sevilla) durante los primeros meses de 1590, relacionados con su actividad como comisario real de abastos recaudando aceite para la armada de Felipe II.
En los últimos años, Cabello Núñez ha localizado 33 documentos cervantinos que no se habían estudiado, sobre los cuales ha publicado varios trabajos en revistas especializadas, tres de los cuales -con el hallado ahora- llevan la firma de Miguel de Cervantes.
Estos tres documentos firmados forman parte de los fondos del Archivo de Protocolos Notariales de Sevilla, si bien otros documentos cervantinos sin la firma del escritor pero que reflejan datos de su vida y de su actividad recaudatoria los encontró en otros archivos de la ciudad, como el General de Indias.
El documento con la firma de Cervantes hallado ahora por Cabello Núñez tiene relación, según explicó, con otro hallazgo de hace más de un siglo, de 1902, que el biógrafo de Cervantes Cristóbal Pérez Pastor encontró en el Archivo General de Simancas (Valladolid).
Este documento de Simancas es una certificación de 6 de marzo de 1589, expedida por un escribano de Sevilla llamado Francisco Albadán que reproduce la carta de pago otorgada ese mismo día por Miguel de Cervantes acreditando haber recibido cien ducados para pagar los gastos de la molienda del trigo que entre 1587 y 1588 había acopiado en Écija y en otros lugares de su comarca para el abastecimiento de las armadas reales.
El documento con la firma de Cervantes ahora hallado en Sevilla por Cabello Núñez es, precisamente, la carta de pago original cuya copia encontró en Simancas Pérez Pastor hace algo más de un siglo.
Por otra Parte, Cabello Núñez también ha descubierto entre los protocolos notariales sevillanos otros doce documentos cervantinos que pueden ampliar lo conocido sobre la labor de Cervantes en Carmona.
El paso de Cervantes por Carmona fue estudiado por el arqueólogo británico Jorge Bonsor, quien en 1885 encontró un documento autógrafo de Cervantes en el Archivo Municipal de Carmona, y por el gran biógrafo cervantino Luis Astrana Marín, quien encontró una veintena de documentos municipales y protocolos notariales de Carmona relacionados con la actividad de Cervantes en 1590 requisando aceite para abastecer a la armada.
Estos doce documentos hallados ahora por Cabello Núñez, según el investigador, permiten completar la nómina de los vecinos de Carmona de los que Cervantes obtuvo aceite, así aumentar la cantidad total de aceite que sacó de Carmona, ya que se trata de cartas de pago otorgadas por varios de sus vecinos que contienen esa información.
Esas cartas de pago están fechadas entre el 16 de junio y el 28 de julio de 1590 y acreditan las arrobas que se entregaron al comisario real de abastos Miguel de Cervantes, en aquella fecha al servicio de Francisco Benito de Mena, delegado del proveedor general Antonio de Guevara en el Puerto de Santa María (Cádiz).
Con estos nuevos documentos, Cabello Núñez ha concluido que la cantidad de aceite que Cervantes recibió de los vecinos de Carmona fue mucho mayor de la calculada gracias a los hallazgos documentales de Astrana Marín, cuya suma daban 665 arrobas.
Con las cartas de pago ahora halladas por el investigador sevillano esa cifra se eleva a las 1.051 arrobas de aceite, ya que esta nueva documentación certifica que se entregaron 386 arrobas más, a un precio de 4.632 reales (doce reales por arroba), con el detalle de los nombres y apellidos de cada uno de los vecinos de Carmona, entre ellos algunos de los más pudientes de la ciudad.
Además de la carta de pago firmada por Cervantes encontrada ahora, Cabello Núñez dio a conocer en 2014 y en 2019 otros dos poderes notariales firmados por el autor del Quijote, entre el total de 33 documentos cervantinos que ha encontrado en archivos sevillanos.
fjb