El país desmoronándose y la candidata y los candidatos a la Presidencia en sus campañas de cuarta.

Siguen enrolados en los departamentos de los hijos del Peje, la sociedad fifí, Hugo Chávez, el “miedo o Meade”, el populismo en la paja del ojo ajeno, la mochadera de manos y hasta la idea de la pena de muerte.

Mucha propaganda con información incompleta, falsa, irresponsable o de plano absurda y violadora de derechos.

Mientras ella y ellos se enlodan, a nuestros jóvenes (y a cualquier persona) los confunden con delincuentes . Son “levantados”, torturados, ejecutados, diluidos en ácido, quemados en basureros o arrojados al olvido en fosas comunes. Todos estos horrores, de acuerdo con datos oficiales.

Lo único que se requiere para vivir y morir en la pesadilla mexicana es estar en el lugar equivocado, a la hora equivocada. Espacios y tiempos que aumentan y se fortalecen con la presencia del crimen organizado y la ineficacia y/o complicidad de las autoridades.

No se puede entender este drama sin la colusión o incapacidad del Estado.

Nuestro presente y futuro permanece capturado en el brutal asesinato de tres estudiantes de cine: Jesús Daniel, Javier Salomón y Marco Francisco. En los 43 normalistas de Ayotzinapa. En la desaparición forzada por parte de militares de Nitzia Paola, Rocío Irene y José Ángel (cuyos familiares concluyen audiencia hoy en la Corte Interamericana de Derechos Humanos). En los 6 jóvenes de Tlaxcala. Y en tantas otras historias de padres que lloran a sus hijos, de madres que escarban la tierra en busca de algún resto que les dé un momento de paz en el sufrimiento infinito de la pérdida.

Vergüenza les debería de dar a Margarita Zavala y a José Antonio Meade por no romper y condenar la estrategia fallida de Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto .

Vergüenza le debería de dar a Ricardo Anaya por descalificar a Andrés Manuel, en cadena nacional, con el uso de metodologías que conducen a afirmaciones poco claras sobre una realidad tan dolorosa como el secuestro. Y no conforme, desacreditar el trabajo de Verificado 2018 que señala las inconsistencias.

Las verdades a medias son potenciales mentiras generalizadas.

Vergüenza le debería de dar a López Obrador por menospreciar a la audiencia y no aprovechar el primer debate para profundizar en sus propuestas sobre temas vitales de seguridad y justicia. No es suficiente que salgan Olga Sánchez Cordero y Alfonso Durazo a explicarlas. AMLO tendría que confirmar las importantes alternativas que escuchamos en voz de quienes formarán parte de su gabinete en caso de ganar. De El Bronco, ni hablar. Parece no tener… vergüenza.

Ojalá se pusieran a la altura de la emergencia nacional. Están a tiempo de colocarse en otro lugar, los cinco.

RAZONES Y PASIONES

: La buena: diputados y senadores, en su mayoría más comparsa que equilibrio y oposición, ya se van. Termina la legislatura el 30 de abril.

La mala: En estas últimas horas podrían discutir la Ley Orgánica y designar al fiscal general sin haber reformado el artículo 102 de la Constitución.

Más de 300 organizaciones exigen “no al albazo”. Sí a una #FiscalíaQueSirva.

Twitter: @elisaalanis
Facebook: Elisa-Alanís-Zurutuza

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