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Cuatro de cada diez (40.1%) de las empresas en México han solicitado o tenido algún tipo de financiamiento desde que iniciaron operaciones.

Según los resultados de la Encuesta Nacional de Financiamiento de las Empresas (Enafin) divulgados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) y la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV), en 2014 la principal fuente de financiamiento a la que acudieron las empresas fue la banca comercial (76.5%), seguida de los proveedores (31.7%).

En México existe una demanda de crédito importante, pues cerca de una de cada tres empresas considera solicitar un crédito en los siguientes 12 meses. De éstas, 52% lo utilizaría para hacer crecer su negocio, precisó el presidente de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores, Jaime González Aguade, durante la presentación de los resultados de la encuesta.

Además, 27.6% de las empresas solicitaron algún crédito en 2014, sobresaliendo las medianas y grandes, con proporciones de 53.0% y 41.8%, respectivamente.

Por su parte, 30.3% de las empresas pequeñas solicitó crédito, mientras que en las microempresas la proporción fue de 21.5%.

Esta encuesta brinda información para identificar fuentes, necesidades y condiciones de financiamiento a las empresas, así como sobre el uso del financiamiento y los servicios financieros de las empresas en México, destacó el presidente del Inegi, Julio Santaella.

La Enafin revela que nueve de cada 10 solicitudes de financiamiento de las empresas fueron aprobadas.

Además, para los casos de rechazo, los principales motivos fueron el mal historial crediticio (17%) y la baja capacidad de pago (13.4%), mientras que a 14.2% de las empresas rechazadas no se les detalló el motivo.

El 51.4% de las empresas considera que el principal factor que puede limitar el acceso al financiamiento es el alto interés del crédito, mientras que 29.3% señala que se establecen muchos requisitos. Entre las empresas que nunca han solicitado financiamiento, 51.1% indican que es porque no les interesa o no lo necesitan.

Por otra parte, 40.8% de las empresas consultadas declararon hacer uso de recursos propios para solventar operaciones. La principal fuente de financiamiento con recursos propios fueron las utilidades, con 57.2%, seguida de los ahorros, con 47.7%, y la venta de activos, que representa 12.6%.

Las empresas que obtuvieron recursos de inversiones fueron apenas 3.2% del total, de los cuales 64.9% fue a cambio de utilidades, pero sin la toma de decisiones en la administración, y 35.1% fue a cambio de utilidades y con la posibilidad de participar en la toma de decisiones de la empresa. La mayor parte del origen de esas aportaciones (82.5%) fue de amigos y familiares, 11.5% de inversionistas extranjeros y 10% de una empresa o corporación.

El principal medio que usan las empresas grandes, medianas y pequeñas para realizar sus operaciones financieras es la banca en línea, utilizado por 97.7%, 97.9% y 83.5%, respectivamente. Sin embargo, en las microempresas el principal medio es a través de las sucursales de las instituciones financieras, situación que se presenta en 75.4% de los casos. Además, 33 de cada 100 empresas aceptan pagos con tarjeta por parte de sus clientes.

Por actividad económica se advierte que 51.5% de las empresas del sector comercio aceptan pagos de esta manera, situación que se presenta en 32.2% y 10.2% de las compañías dedicadas a los servicios y a las manufacturas, respectivamente, y sólo en 1.5% de las constructoras.

El 60.6% de las empresas cuentan con alguna póliza de seguro, y entre las que no cuentan con esa herramienta 45.1% declararon que es debido a que es cara.

El sector de la construcción registra el mayor porcentaje de empresas con seguro, con 75.2%, seguido por el sector comercio, con 67.1%. Sólo 56.2% de las empresas del sector servicios declararon haberlo contratado.

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