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La división que se da en el mercado de telecomunicaciones entre servicios mayoristas y minoristas amplía el acceso a estos y fomenta la aparición de comercializadores diferentes a los existentes, dijo Gregorio Tomassi, analista financiero de Itaú BBA.
Hay una intención, no necesariamente declarada así, por parte de la regulación, para en los próximos años tener una mejor o mayor separación entre los servicios que se entregan al minorista, al consumidor frente a los servicios en términos mayoristas.
“Es un esfuerzo consciente de la regulación, no necesariamente explícito de tratar de crear una transparencia y separación entre lo que es mayorista y minorista”, señaló Tomassi durante un foro organizado por Observatel y Central Ciudadano y Consumidor.
Entre las divisiones de servicios mayoristas y minoristas se encuentran la Red Compartida y la separación funcional de Telmex.
“En fijo, el esfuerzo se llama separación funcional de Telmex que está andando, en móvil, el esfuerzo se llama o lo identifico como Altán Redes”, detalló Tomassi.
Respecto a Altán Redes, comentó que es un esfuerzo para poner una oferta diferente de un operador que sólo opera dando servicios mayoristas para ampliar el acceso y la aparición de otros comercializadores.
Con esta división de servicios, el consumidor puede contar con mejores servicios, mayor variedad de ofertas y atención a varias necesidades.
Altán Redes ganó una licitación y firmó un contrato de Asociación Público-Privada con la SCT para desarrollar la Red Compartida, que dará cobertura nacional de 92.2%.
Por otra parte, el Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT) impuso a Telmex una regulación asimétrica que obliga a la empresa a dividirse en dos: una empresa que dará servicios a la competencia y un negocio que brinde servicios al usuario final.