No están todas las que son pero sí son todas las que están. Seguramente faltan muchas películas malas que se hayan estrenado en 2015, pero obviamente esta lista sólo incluye aquellas que tuve el infortunio de ver en la sala de cine. Compartan sus listas, ¿cuáles fueron para ustedes las peores cintas de 2015?

10.- Tomorrowland

La gran decepción del año. Todo el tiempo estamos expectantes a la gran cinta de ciencia ficción que nunca llega. En su lugar,Brad Bird entrega un panfleto que  se acerca peligrosamente a la charlatanería del nuevo management, donde sólo unos cuantos tienen derecho de piso en ese futuro limpio (con estética de aeropuerto), aséptico y en el que los críticos y pesimistas cuentan con el destierro como única opción. Me queda claro que yo jamás estaría invitado a Tomorrowland.

9.- The Hunger Games: Mockingjay Part 2

El peor pecado que puede cometer una película es ser aburrida, y vaya que abunda la aburrición en este último capítulo de Hunger Games. Esta cinta debería ser una moraleja para Hollywood: no es bueno que gane el dinero, si Hunger Games no hubiera sido artificialmente alargada para hacer una cuarta cinta, la saga habría terminado en una nota altísima. Más doloroso aún cuando te das cuenta que esta es la última película de Phillip Seymour Hoffman. Injusticia total.

8.- Avengers: Age of Ultron

Avengers se suponía era la joya de la corona para Marvel /Disney, la piedra angular de su fabuloso “universo cinemático”, y como tal, no sólo es mala sino además decepcionante. Avengers 2 es básicamente la misma película que Avengers 1 pero en otra locación y con otros monstruos. Pero aún con todo ello, es valiosa al menos por una cosa: hacer evidente que a Disney no le interesa hacer cine, sino vender expectativa. A Disney lo que le interesa es que este tema de los superhéroes no se acabe nunca y para ello siempre tiene que apuntar al futuro: ahí estará la gran revelación…. que nunca llegará.

Y lo mismo, justo lo mismo están haciendo con Star Wars.

Al tiempo.

7.- Poltergeist

Análogo contra digital. La idea no era mala: ¿cómo sería Poltegeist en la actualidad?, siendo que ahora vivimos rodeados de pantallas, no solamente la del televisor. Y aunque tiene sus momentos, al final lo único que pareciera interesarle a su director (Gil Kenan) es seguir haciendo juego con la tecnología: en algún momento de la trama, hasta un dron llega a tener un papel relevante en esta historia de sustos. Ya no sabemos si esto es una película de terror o un catálogo de tienda de electrónicos.

6.- Taken 3

Otro de esos fenómenos como para escuela de cine: ¿cómo hace Hollywood para echar a perder incluso sus fórmulas comerciales más exitosas? La primera Taken contaba con la fascinación de lo absurdo llevado al límite de lo badass. Liam Neeson se erigía como uno de los grandes hombres de acción. Y luego, la repetición infinita de lo mismo. Qué forma tan espectacular de echar al caño a un gran personaje.

5.- Dos Locas en Fuga

Si tan solo existiera la justicia, la Academia debería estar tocando la puerta de Reese Whiterspoon para pedirle de regreso aquel Oscar que le dieron en 2006 por Walk the Line. La señora Whiterspoon al parecer está empeñada en hacer una película mala cada año (This Means War, Wild), por lo que esperemos que en 2016 se tome un sabático, por el amor de dios.

4.- Ella es Ramona

Además de simplona y cursi (cosas que podrían pasar incluso como características y no defectos), el gran problema de esta película es que no va a ningún lado: ni se decide a criticar la discriminación que sufren las personas obesas en ciertos círculos de trabajo, ni tampoco se atreve a hacer humor sobre los gordos. Se decide mejor por hacer chistecitos leves, perderse en subplots que no aportan nada y dejarlo todo en un mensaje optimista y ñoño.

3.- A la Mala

La realidad es que esto no es una película, se trata de hora y media del product placement más descarado que se ha visto en el cine mexicano. Con apenas 20 minutos de metraje conté aproximadamente quince marcas cuyos productos aparecen sin ninguna sutileza en la cinta. A eso añádale un remedo de historia, clasista a más no poder, donde los personajes -todos- son guapos, exitosos, viven en Santa Fe y manejan autos que de tan caros ni me sé las marcas. Esta película merecía ser multada por el mismo delito que al Partido Verde: llenar las pantallas de cine con sus inmundos comerciales.

2.- La Noche de Iguala

El problema con La Noche de Iguala no es qué posición tome respecto a los hechos de Ayotzinapa, el problema es la torpeza absoluta con la cual pretende exponer su punto. Un documental que inicia con una epígrafe donde dice que “cualquier parecido con la realidad es una coincidencia”; es decir, estamos frente a un documental que se niega a sí mismo, una nulidad absoluta. El montado de las imágenes es tan torpe que la película podría verse con los ojos cerrados y no nos perderíamos de nada.

La principal virtud de la cinta no está en la pantalla, está en las reacciones: aquellas hordas que pedían se prohibiera su exhibición. Una muestra más de la intolerancia absoluta que se vive a diario en el país.

1.- Fantastic Four

No dejo de pensar que Fantastic Four era originalmente otra cinta, pero alguien metió las manos y todo se fue al carajo, convirtiéndose así en una de las peores películas del género y que -irónicamente- tuvo muy buena recaudación en México. Nos gusta la basura, sin duda.

Twitter: @elsalonrojo

Google News

Noticias según tus intereses