Al ritmo que va, a México le faltan cuando menos 30 años para que su población alcance el nivel educativo de economías más fuertes y países más avanzados, que es el nivel de cuando menos bachillerato.

Durante el foro de Educación en la serie de “La UNAM y los desafíos de la nación”, que se organizó en la Coordinación de Humanidades, el investigador Roberto Rodríguez  señaló que esto no ocurrirá en todo el país por igual puesto que existen brechas en la calidad de la educación que se ofrece en entidades avanzadas como el Distrito Federal y Nuevo León, y lugares donde hay un retraso y pobreza importantes como Chiapas y Oaxaca.

“La escolaridad promedio del país subió un año cada diez años. Esto significa que faltan 30 años para que toda la población pueda concluir la educación media superior, lo que es la escolaridad promedio de los países avanzados”, dijo.

El investigador del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE) explicó que existe una correlación entre las condiciones socioeconómicas de la población y las condiciones de las escuelas puesto que solo en la Ciudad de México y en Nuevo León los planteles y la infraestructura son “satisfactorios” mientras que en el resto del país están en condiciones mediocres y en estados pobres el déficit es muy alto.

“Oaxaca y Chiapas están como a 30 años de distancia en tanto a la deficiencia de educación y la escolaridad de la población. Se está ampliando la brecha entre las entidades con mejor nivel de desempeño y las menos favorecidas”, dijo. “En México, la educación de y para los más pobres, no sirve para salir de la pobreza”.

En el foro se criticó el nuevo modelo educativo que recientemente presentó la Secretaría de Educación Pública (SEP), Imanol Ordorika del Instituto de Investigaciones Económicas señaló que está destinado al fracaso puesto que no tiene consenso entre la población y no existe un verdadero compromiso político con él; dijo que la reforma educativa es "un engaño, un mito y un fraude".

“El engaño porque nos han querido hacer creer que los problemas de la educación en México se deben a que los maestros son malos, poco comprometidos y corruptos; el mito es en la evaluación, cuando nos dicen que con base en ella se resuelve el problema; y el fraude porque hay un millón 200 mil maestros y la ley que ellos mismos hicieron los obligaría a evaluar al menos a 500 mil cada año, pero sólo lo han hecho 150 mil en este periodo, y lo siguen posponiendo para después de 2018 porque quien sabe cómo vienen las elecciones”.

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