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A 88 años del asesinato de uno de los revolucionarios más apreciados, la Embajada de Cuba realizó un breve homenaje para conmemorar el aniversario luctuoso de Julio Antonio Mella.
El 10 de enero de 1929 Mella fue ejecutado en calles mexicanas, en la esquina de Abraham González y Morelos, donde previamente el contingente de diplomáticos latinoamericanos acudió a dejar una ofrenda floral.
Frente al busto de Mella, en el Jardín San Marcos, de la colonia Tabacalera, representantes diplomáticos de Cuba, Argentina y Venezuela, así como autoridades de cultura de la Ciudad de México y representantes de la delegación Cuauhtémoc, entonaron los himnos de México y Cuba.
Sonia Itzel Gutiérrez Olvera, del Movimiento Mexicano de Solidaridad con Cuba, fue la encargada de iniciar el homenaje, en el cual destacó la lucha de Julio Antonio “contra el cáncer del imperialismo” e hizo un llamado para exigir la devolución de Guantánamo y el cese del bloqueo económico de Estados Unidos a Cuba.
José Alberto Prieto Sánchez, consejero jurídico de la Embajada de Cuba, destacó la trayectoria de Mella como fundador del Partido Comunista y de la Federación Estudiantil Universitaria (FEU) de Cuba.
Destacó las últimas palabras del comunista y periodista al momento de ser asesinado: “Muero por la revolución” y pidió a los presentes seguir sus pasos para “que los tiempos futuros sean mejores”.
Los presentes dejaron ofrendas florales al pie del busto y guardaron un minuto de silencio.
La encargada de negocios de la embajada, Sonia Hernández Camacho, resaltó la importancia de recordar a personajes como Julio Antonio Mella, sobre todo después de la muerte del líder de la revolución cubana, Fidel Castro.
