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En 2015 fallecieron 37 mil 190 personas por lesiones accidentales, mil 373 más que en el año 2014, informó la Secretaría de Salud (Ssa).

Según el Perfil de Lesiones que publica la dependencia, de estos decesos 26% fueron clasificados como ahogamientos, asfixias, caídas, envenenamientos e intoxicaciones y quemaduras.

Menores de edad y adultos mayores son los grupos en los que más se presentan este tipo de lesiones y el lugar donde ocurren con mayor frecuencia este tipo de percances es en el hogar, con 32.6%.

Del total de defunciones por estas cinco causas, la mayor parte se concentra en asfixias, con 2 mil 952 (30.1%); seguida de las caídas, con 2 mil 713 (27.7%); ahogamientos, con 2 mil 132 (21.8%); envenenamientos e intoxicaciones, con mil 435 defunciones registradas (14.6%), y finalmente las quemaduras, con 564 (5.8%)

El Secretariado Técnico del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes, que pertenece a la Ssa, hizo público este informe nacional de lesiones accidentales, a fin de alentar a las autoridades de las tres órdenes del gobierno, a las organizaciones de la sociedad civil, la industria y a la población en general a reflexionar sobre este problema de salud pública y sumar esfuerzos para realizar acciones y prevenir las lesiones accidentales.

El perfil nacional señala que mil 814 hombres, 312 mujeres y seis individuos no especificados murieron a causa de ahogamiento.

El grupo más vulnerable está conformado por personas de 20 a 59 años de edad y la mayor incidencia de estos accidentes ocurren mientras se nada en aguas naturales.

Asfixias y caídas. Respecto a las asfixias, se reportó que 2 mil 136 hombres fallecieron por este motivo, 814 mujeres y dos personas sin identificar. También el grupo de 20 a 59 años de edad es el más afectado, seguido por los menores de edad de cero a nueve años.

La vivienda particular es donde más suceden este tipo de accidentes y la inhalación de contenidos gástricos, así como la obstrucción no especificada de la respiración son las causas más legales que derivan en esta lesión.

Las caídas provocaron en 2015 el fallecimiento de 2 mil 163 hombres y 550 mujeres. Las edades más frecuentes en las que suceden estos accidentes es en personas de 20 a 59 años y mayores de 60 años. Entre los motivos más frecuentes para perder la vida de esta manera, está el caer de las escaleras o escalones y de edificios o construcciones.

Otro accidente común es el envenenamiento o intoxicación, el cual cobró la vida de mil 115 varones y 300 mujeres. El grupo etario de 20 a 59 años es el más propenso a sufrir estas lesiones y las causas van desde ingerir sustancias no farmacológicas, así como el uso de drogas.

Por último, las quemaduras causaron la muerte de 390 hombres y 174 mujeres. Los hogares son los sitios más frecuentes en donde ocurren este tipo de desgracias. La exposición a humos, fuegos o llamas no especificados son las causas predominantes para provocar incendios que derivan en la muerte de una o varias personas.

El Secretariado Técnico del Consejo Nacional para la Prevención de Accidentes recomienda a la población seguir una serie de medidas de protección civil en los hogares para evitar este tipo de lesiones.

Hay que cerrar válvulas de gas, llaves de agua y desconectar los aparatos eléctricos, tener siempre a la mano un directorio con los números de emergencia y revisar las condiciones mecánicas de los vehículos.

Esta autoridad sanitaria menciona que en época vacacional es común visitar arroyos, lagos, mar abierto o piscinas, lugares en donde ocurren gran número de muertos por ahogamiento.

Ante esta situación, señala que se debe enseñar a niños de edad escolar nociones básicas de natación, seguridad en el agua y socorrismo; promover la identificación y eliminación de riesgos en el hogar como el cierre de cisternas, pozos o piletas con tapa metálica y candado.

Al referirse a los adultos mayores, menciona que los principales factores de riesgo de caídas son la falta de agudeza visual, disminución de capacidades físicas, cognitivas y sobremedicación, condiciones inadecuadas de la vivienda como escaleras estrechas, superficies resbaladizas, poca iluminación, presencia de alfombras, uso de calzado inadecuado, prendas de vestir sueltas, sillas de ruedas, bastones y andaderas inadecuadas.

En los adolescentes, los principales riesgos son la práctica de actividades o deportes extremos sin equipo de seguridad, así como el consumo de alcohol y de drogas ilícitas.

Los envenenamientos o intoxicaciones cobraron la vida de mil 435 personas por consumo de drogas, abuso de alcohol, monóxido de carbono y exposición a veneno de animales.

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