CNTE amenaza con radicalizar protesta

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La Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) advirtió que entre más se tarde el inicio de un diálogo sobre la reforma educativa con el gobierno federal, crecerá la movilización del magisterio.

Adelfo Alejandro Gómez, secretario general de la Sección 7 de Chiapas, dijo lo anterior al concluir el mitin de la coordinadora que se realizó luego de la marcha que se llevó a cabo ayer por la tarde desde el Ángel de la Independencia y que pretendía llegar al Zócalo. A los maestros y a las organizaciones, así como a académicos e investigadores que los acompañaron, les impidieron el paso policías capitalinos hacia la Plaza de la Constitución.

Una comisión negociadora se conformó para pedir de manera oficial, con base en el derecho al libre tránsito y manifestación, el paso al Zócalo. Sus integrantes informaron que Patricia Mercado, secretaria de Gobierno de la Ciudad de México, les dijo, vía telefónica, que el bloqueo de oficiales que impedía su paso hacia el Zócalo era “por cuestión federal”.

Al tener el rechazo a su petición permanecieron casi frente a Bellas Artes sobre Avenida Juárez para realizar un mitin. “Hoy dimos muestra de la civilidad de nuestro pueblo, no caímos en la provocación, pero en algún momento nos vamos a disponer a recuperar la plaza que es de todos los mexicanos”, dijo el líder magisterial de Chiapas.

Marcharon con ellos integrantes del Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), algunos padres de los normalistas de Ayotzinapa, el Frente Popular Francisco Villa y la Federación de Estudiantes Campesinos Socialistas de México, académicos y estudiantes de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

No hubo incidentes durante la marcha a la que acudieron maestros disidentes encabezados por los líderes Adelfo Gómez, de Chiapas, Ramos Reyes, de la Sección 14 de Guerrero, y Victor Manuel Zavala, de la Sección 18 de Michoacán.

Entre consignas como “aquí y ahora con la coordinadora” los más de 7 mil maestros, según cálculos de los monitores del gobierno de la Ciudad de México, caminaron del Ángel de la Independencia a las inmediaciones del Palacio de Bellas Artes. Ahí policías capitalinos les impidieron el paso a
los manifestantes.

La Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México informó que para la marcha desplegó a 4 mil 500 elementos de las policías de Proximidad, Metropolitana, Auxiliar y Bancaria e Industrial, Tránsito, así como del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas, de la Dirección General de Servicios Aéreos, entre otros, apoyados con 139 vehículos.

Los maestros, cansados de esperar el ingreso al Zócalo que no llegó, decidieron retirarse al campamento de la Plaza de La Ciudadela.