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En el Congreso, las bancadas del PRI brindaron su respaldo al presidente Enrique Peña Nieto ante la inconformidad por los aumentos a los precios de las gasolinas y propusieron ampliar las medidas de austeridad y ahorro de los tres poderes federales y en los tres órdenes de gobierno, así como pedir que la Secretaría de Hacienda explique la metodología de los precios máximos de los combustibles.

Por su parte, la oposición de izquierda en ambas cámaras legislativas confirmó que va en contra de las alzas y urgió dar marcha atrás en las medidas. El PAN criticó que el gobierno federal haya dejado pasar el tiempo sin contener las protestas en todo el país.

En el Senado, el coordinador del PRI, Emilio Gamboa Patrón, pidió austeridad en el sector público y llamó a la unidad de los sectores, a los que exhortó “a que asumamos un enorme compromiso con la gobernabilidad”.

Gamboa, mediante un comunicado, exhortó a que “las manifestaciones de inconformidad se lleven a cabo dentro de la legalidad y el orden, y que no alienten actos de vandalismo que lastimen a la sociedad”.

En apoyo de las alzas a las gasolinas y el diesel, el priísta afirmó: “Entendemos que estas decisiones generan rechazo; sin embargo, la realidad internacional obliga al Estado mexicano a aplicar estas medidas; de no hacerlo, los mexicanos viviríamos una situación económica aún más delicada que afectaría sensiblemente la economía de las familias mexicanas”.

El llamado a la austeridad lo extendió Gamboa “al poder Ejecutivo, a las cámaras del Congreso, al Poder Judicial de la Federación, a los tres órdenes de gobierno, a los organismos autónomos del Estado, así como los sectores y entidades que ejerzan recursos públicos para que a la brevedad presenten medidas de austeridad y ahorro”.

En un boletín, el coordinador del PAN, Fernando Herrera Ávila, pidió que la Secretaría de Hacienda “establezca un nuevo recorte al gasto público, con la finalidad de reducir el Impuesto especial Sobre Producción y Servicios (IEPS) a las gasolinas”.

Lamentó que pase el tiempo sin que se adopten “las medidas que se requieren en estos momentos para proteger la economía de las familias”.

Expresó que “si bien es cierto que el país atraviesa por una severa crisis por el tema de las gasolinas, el alza en el costo de los productos de la canasta básica y la inseguridad, es necesario actuar con mesura”.

Recordó la decisión del PAN de que sea llamado a comparecer el director de Pemex y el secretario de Energía, además de que se solicite a la Comisión Federal de Competencia Económica “la evaluación de las condiciones del mercado y se atenúen los efectos negativos sobre los bolsillos de las familias mexicanas” por los incrementos.

El senador Miguel Barbosa Huerta (PRD) dijo de manera rotunda que su bancada está en contra de los incrementos de precios de los petrolíferos, y estableció que “cuando hay una equivocación legislativa, se corrige con otra acción legislativa, y en este caso se debe derogar el gasolinazo de la Ley de Ingresos, expresado en los artículos transitorios 11 y 12”.

Dijo: “Yo llamo a todos los legisladores federales, diputados y senadores a que nos pronunciemos en contra del aumento de la gasolina”, y explicó que “cuando el Congreso de la Unión aprobó la Ley de Ingresos, no tuvo elementos para medir el impacto”.

En la Cámara de Diputados, el PRI informó que este jueves propondrá un punto de acuerdo de urgente resolución ante la Comisión Permanente, a fin de que “en un plazo no mayor de 10 días, la Secretaría de Hacienda explique de manera pormenorizada la metodología para determinar los precios máximos de la gasolina correspondientes al interior de la República y las siete fronteras del norte”.

La oposición afirmó que las alzas son clara muestra de insensibilidad e irresponsabilidad.

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