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Tras advertir que el país tiene una tasa de 57.4% de informalidad laboral, la más baja en la última década según el Inegi, el presidente Enrique Peña Nieto llamó a “redoblar el esfuerzo”, a fin de llevar a la formalidad a más mexicanos que ocupan una plaza en el país.

Anunció cuatro acciones para apuntalar la generación de empleos formales, con miras a reducir al menos en un punto porcentual por año la tasa de informalidad, y urgió a hacer un compromiso compartido para reducir los empleos informales a lo largo del territorio nacional.

Tras mencionar una serie de indicadores en materia laboral, el Ejecutivo pidió “no bajar la guardia”.

Las cuatro acciones para apuntalar la formalidad laboral en el país comprenden: primero, impulsar las Zonas Económicas Especiales, cuyo decreto se promulgará en los próximos días. Adelantó que se localizarán en las entidades con mayor tasa de informalidad y en donde este indicador ha crecido.

La segunda vertiente será el Programa de Reactivación Económica para el Desarrollo Productivo de Campeche y Tabasco, para hacer frente a las afectaciones por la baja en los precios de la industria petrolera, incluyendo la pérdida de empleos formales.

La tercera acción anunciada por el Presidente en Palacio Nacional fue el diseño de nuevos esquemas para la formalización de los jornaleros agrícolas y la cuarta, la implementación de Convenios para la Ejecución de Acciones en materia de Formalización del Empleo.

Explicó que estos convenios —como los que fueron suscritos ayer en Palacio Nacional por los gobiernos estatales, la Secretaría del Trabajo y el IMSS— se basan en la experiencia de 2013, los cuales establecen, al igual que los suscritos hace tres años, metas en la reducción de la informalidad por entidad federativa.

“El compromiso se define conforme a su capacidad de generación de empleos formales y a sus niveles de informalidad. Además, para cada estado se ha realizado un diagnóstico específico con las principales áreas de oportunidad para reducir su informalidad.

“A nivel nacional el objetivo es reducir, por lo menos, en un punto porcentual la tasa de informalidad laboral este año y los subsecuentes, con ello buscamos que más trabajadores encuentren en su empleo una vía de condiciones de mayor bienestar y tranquilidad para sus familias”, detalló.

El Presidente de la República dijo que la cifra de informalidad “sigue siendo alta”, y pese a que hay entidades con más de 70% de la población económicamente activa en la formalidad, hay estados con tasas de 70% y 80% sin un trabajo formal.

En el Patio de Honor de Palacio Nacional, el presidente Peña Nieto dijo que de haberse mantenido la tasa de informalidad que había hace tres años, y con el crecimiento que ha tenido el mercado laboral, hoy casi 700 mil personas más serían informales.

“Hemos logrado detener esta tendencia creciente que había hacia la informalidad; hoy estamos trabajando para revertirla y asegurar que los trabajadores estén dentro de la formalidad”, puntualizó.

Puso énfasis en que a nivel estatal, en los tres años que van de su gobierno, la tasa de informalidad laboral se redujo en 22 de las 32 entidades federativas. Hizo un reconocimiento a los estados que han cumplido con los compromisos para fomentar el empleo formal.

Señaló que un empleo formal genera un impacto positivo en la economía y al mismo tiempo brinda importantes beneficios al trabajador y su familia.

Hizo notar que 40% de los trabajadores formales generan 76% del Producto Interno Bruto (PIB). Además cuentan con acceso a servicios de salud, seguro de vida o por incapacidad, financiamiento para la vivienda y el consumo, guarderías para sus hijos y seguros de retiro.

“Estas prestaciones elevan la remuneración económica del trabajador, llegando a representar estos beneficios hasta 24% de sus ingresos y, sobre todo, significan una mejora importante en su calidad de vida, especialmente cuando alcanzan la tercera edad.

“La formalidad también protege los derechos laborales de los trabajadores... si bien los logros alcanzados son importantes, no podemos bajar la guardia”, comentó.

Enrique Peña Nieto aceptó que estos convenios no son para terminar con el problema de la informalidad, pero sí para contribuir mediante una política pública a la formalización del empleo en el país.

Confianza en México. En su mensaje, el presidente Peña Nieto afirmó que México es un país que sigue adelante, ya que hoy tiene más fortalezas que lo consolidan como una economía atractiva para las inversiones generadoras de empleo.

Destacó que durante el primer trimestre del año la Inversión Extranjera Directa fue de mil 896 millones de dólares, la más alta desde hace 17 años, cuando comenzó a medirse. Dijo que en lo que va de su gobierno este indicador suma casi 110 mil millones de dólares, cifra cercana a 70% de la meta sexenal.

“Estas cifras confirman que en una economía mundial incierta y volátil, los inversionistas continúan eligiendo a México como un destino seguro”, dijo, al explicar que por eso su administración pone empeño para mantener la confianza y atraer inversiones.

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