Legisladores critican labor de procurador

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Por más de seis horas, senadores cuestionaron los vínculos de Alejandro Jaime Gómez Sánchez con funcionarios de la administración pública, lo que podría llevarlo a caer en conflictos de interés como candidato a ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).

Su trayectoria de 25 años en cargos públicos, sus nexos con el consejero de la Judicatura Federal, Humberto Castillejos, y del gobierno de la República, así como casos polémicos de feminicidios y Tlatlaya, fueron los puntos en contra que señalaron senadores de la Comisión de Justicia al también procurador de Justicia del Estado de México.

Gómez Sánchez compareció ante la Comisión de Justicia del Senado como parte de las presentaciones de los candidatos a ministros de la Corte. En la Cámara Alta, legisladores independientes, del PRD y PT arremetieron en contra del procurador por su cercanía al consejero jurídico del Ejecutivo federal, Humberto Castillejos Cervantes y al presidente Enrique Peña Nieto, por lo que argumentaron que hay un conflicto de interés en la integración de las ternas.

El procurador mexiquense se defendió y aseguró que está libre de conflictos de interés, y que nunca ha “recibido instrucción de algún superior o del gobernador del Estado de México (Eruviel Ávila) o el Presidente (Enrique Peña Nieto) para actuar contrario a derecho”.

Afirmó que su capacidad y trayectoria en el servicio público lo ha llevado a estar dentro de las ternas de candidatos a ministros de la Corte. “Pudo haber influido o no el consejero jurídico. La oficina que tramita jurídicamente las propuestas de designación que el Ejecutivo federal presenta al Senado, es el consejero jurídico del Ejecutivo federal. No tendría yo más a poder contestar si el consejero jurídico fue a ver al Presidente de la República o si Alfredo Castillo fue a ver al Presidente, no lo sé, realmente lo desconozco”, respondió por cuestionamientos del senador del PRD, Armando Ríos Piter.

La senadora independiente Martha Tagle calificó de increíble que el Ejecutivo federal envíe al Senado una terna donde existe un candidato cuya figura es cuestionada por su trayectoria en varios cargos desempeñados en la administración pública y cercano al Ejecutivo federal.

“Ha reconocido los fuertes vínculos con la actual administración pública federal”, dijo.

La senadora del PT, Layda Sansores, dijo abiertamente que ya está decidido que Gómez Sánchez será uno de los dos ministros que sustituyan a los ahora ex ministros Olga Sánchez Cordero y Juan Silva Meza.

“Esto es lotería cantada, lotería pactada. Yo empecé a leer su currículum y lo primero que veo, dice: “Ex coordinador de asesores de Medina Mora. ¡Madre!, como dicen en Campeche, pues el fantasma de Medina Mora junto a usted, me aterré”.

El candidato a ministro respondió que en sus 25 años como servidor público en la PGR, Judicatura, PGJDF, entre otras dependencias, se ha mantenido al margen de los titulares de las unidades administrativas y se ha conducido con objetividad e imparcialidad.

El senador del PRD Humberto Fernández Fuentes, también le cuestionó sobre cómo garantizaría ser un ministro independiente; mientras que el candidato respondió que la garantía de independencia la otorga a ley.

Alejandro Encinas, senador que se separó del PRD, precisó que desde hace años el candidato a ministro ha trabajado con el mismo grupo político (PRI), por lo que “difícilmente se puede garantizar la autonomía plena en cualquier órgano. No puede venir a decirnos que nunca ha recibido instrucciones del Presidente o del gobernador. Como procurador tampoco goza de autonomía, porque depende directamente del gobernador”, dijo.

Los senadores de la Comisión de Justicia de la Cámara Alta resaltaron el caso Tlatlaya —de supuestas ejecuciones extrajudiciales de 22 personas— debido a que Gómez Sánchez ha llevado el caso como procurador de justicia del Estado de México.

El senador Encinas criticó el trabajo del procurador en el combate a feminicidios en la entidad y detalló que en los últimos 10 años organizaciones reportan 300 feminicidios.