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Desde que se inició en 2013 la inspección de los 199 circos registrados en el país, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) sólo verificó 75 de ellos y ha decomisado 54 de los mil 46 animales de vida silvestre utilizados en estos sitios de entretenimiento; pero ahora, las autoridades anunciaron que los podrán conservar, porque la ley no se lo impide y, en todo caso, los pueden presentar ante el público sólo en carácter de exhibición, matizó la dependencia.

El titular de la Profepa, Guillermo Haro Belchez, precisó que con base en la adición al último párrafo del artículo 78 de la Ley Federal de Vida Silvestre, lo que queda prohibido es el uso de animales para espectáculos en circos, por lo que tienen el derecho de conservarlos y exhibirlos.

“Los circos pueden seguir presentando sus espectáculos sin un solo animal de vida silvestre, pero los pueden conservar, la ley no lo impide, y pueden presentar su exhibición. Vigilaremos que las jaulas, en las cuales se haga su exhibición, cumplan con instalaciones adecuadas para que tengan una mejor vida”, dijo.

Desde ayer, los circos no pueden utilizar animales para sus espectáculos y la Profepa iniciará procedimientos administrativos en contra de los establecimientos que no hayan cumplido con la Ley General del Equilibrio Ecológico y la Protección al Ambiente y la Ley General de Vida Silvestre.

El funcionario informó que las sanciones y multas contra los dueños de los circos pueden alcanzar hasta 50 mil salarios mínimos y un máximo de cuatro millones de dólares.

El total de animales que hasta ahora han decomisado representa solamente 5% del total identificado.

La dependencia inspeccionó en los últimos dos años a casi cuatro de cada 10 circos; mientras que entre 2009 y abril de 2015, verificó 88 de los 108 zoológicos, en donde se aseguraron cuatro mil 797 animales.

Las medidas de supervisión por parte de Profepa se intensificaron desde el 2 de junio, en particular a los zoológicos y, el último mes, se lograron verificar dos mil 507 animales, de los cuales 926 fueron asegurados.

Tras el anuncio sobre la prohibición de utilizarlos en circos, 35 animales han sido abandonados por sus dueños y fueron rescatados por la Procuraduría en mal estado físico y de salud.

El subsecretario de Gestión para la Protección Ambiental de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Rafael Pacchiano Alemán, reiteró que “los dueños de los circos tienen el legítimo derecho de conservarlos y solamente aquellos animales que ellos decidan no conservar, son los que, como autoridades, estamos obligados por la ley a ayudarlos a conseguir una nueva ubicación”.

El procurador Haro detalló que de los 199 circos que se tenían registrados en el país en 2013, hoy operan 75, y en ellos se verificaron mil 46 animales.

De acuerdo con los inventarios presentados por los circos en 2014, la Dirección General de Vida Silvestre de la Semarnat reporta un total de mil 91 animales, entre aves, carnívoros, invertebrados, mamíferos, primates y reptiles, siendo el tigre, la llama y el papión los de mayor presencia.

En junio pasado, la Semarnat emitió un comunicado a los circos solicitando que en la presentación de sus informes anuales hicieran referencia a los ejemplares autorizados para su aprovechamiento; sin embargo, hasta el momento sólo 55 han presentado ese reporte, del que suman 511 ejemplares.

Por lo tanto, las autoridades ambientales federales no cuentan con un padrón completo que les permita prepararse para reubicar los animales.

“La falta de listas de animales ha impedido conocer el número exacto de ejemplares para determinar sobre el depósito”, admitió el funcionario.

Desde que se publicaron en el Diario Oficial de la Federación, el pasado 9 de enero, las reformas a la ley que prohíben el uso de animales en circos, “la Profepa no ha tenido conocimiento o información sobre muerte o sacrificio de ejemplares. No hay un solo caso”, aseguró el procurador.

El subsecretario Pacchiano indicó que las autoridades están listas para apoyar a los dueños de los circos, para recibir a los animales que decidirán no conservar, los cuales serían trasladados a un zoológico, a una Unidad de Manejo Ambiental (UMA) o en su defecto a uno de los seis centros de conservación e investigación de vida silvestre de la secretaría.

Sin embargo, comentó que los centros de investigación no cuentan con espacios suficientes para albergar las especies de los circos, puesto que los animales que llegan ahí sólo se quedan de manera temporal hasta su reubicación.

“Contamos con seis centros de investigación para vida silvestre. Sin embargo, éstos no tienen espacios para albergar especies de estas características”. Pacchiano reveló que hasta el momento no han recibido ni una solicitud por parte de los circos para que les ayuden a conseguir un mejor destino a sus animales.

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