El ministro italiano del Interior pidió este domingo a los países europeos que abran sus puertos a las embarcaciones que socorren a los migrantes para reducir la carga que sufre Roma, poco antes de una reunión en París con sus homólogos francés y alemán.

Los tres ministros se reunirán en la tarde de este domingo en París para buscar un "enfoque coordinado" con el que ayudar a Italia a hacer frente al flujo de migrantes que llegan a sus puertos, según una fuente cercana a la negociación.

Italia sufre "una enorme presión", declaró, en una entrevista al diario Il Messaggero, el ministro Marco Minniti, cuyo país había amenazado con bloquear la entrada a sus puertos a los barcos extranjeros que transportan a migrantes rescatados en el mar Mediterráneo.

Los barcos que rescatan a migrantes "llevan bandera de diferentes países europeos", subrayó el ministro, explicando que en esas operaciones de rescate participan barcos de oenegés, de la operación naval europea contra los traficantes Sophie y de la agencia fronteriza europea Frontex, además de los guardacostas italianos.

"Si los únicos puertos a los que se lleva a los refugiados son los puertos italianos, hay algo que no está funcionando. Ese es el quid de la cuestión", dijo.

"Yo soy un eurófilo y estaría orgulloso si un solo barco, en lugar de llegar a Italia, fuera a otro puerto. Eso no resolvería el problema de Italia, pero sería una señal extraordinaria" que mostraría que Europa quiere ayudar a Italia, insistió el ministro.

Italia se queja de que se la dejó sola frente a la crisis migratoria y pide más ayuda a sus socios europeos. El país registró desde inicios de año más de 83.000 llegadas de migrantes, un aumento de más del 19% respecto al mismo periodo de 2016. La mayoría proceden de Libia.

Los migrantes son transportados después a puertos italianos en los que son alejados en centros de acogida que se encuentran saturados.

Minitti se reunirá en París a partir de las 18:00 con los ministros de Interior francés, Gérard Collomb, y alemán, Thomas de Maiziere, además del comisario europeo de Migración, Dimitris Avramopoulos.

"La idea es tener un enfoque coordinado y concertado sobre los flujos migratorios en el Mediterráneo central" y "ver cómo se puede ayudar mejor a los italiano", de cara a la reunión informal de ministros del Interior de la Unión Europea (UE) del 6 de julio en Tallin, indicó el viernes desde la capital francesa una fuente cercana a la reunión.

El jueves en Berlín, tanto la canciller alemana, Angela Merkel, como el presidente francés, Emmanuel Macron, dijeron estar dispuestos a apoyar mejor a Italia.

El ministro italiano indicó que Roma intentará desplazar a Libia el proceso de solicitud de asilo, para trasladar a Europa los migrantes que lo obtendrían con seguridad.

"Debemos diferenciar entre quienes [...] tienen el derecho a una protección humanitaria y los que no", dijo. Y "debemos asegurarnos de que los primeros puedan partir hacia Europa, en tanto que los migrantes económicos deben ser repatriados sobre una base voluntaria", explicó.

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