Al menos tres mujeres, incluyendo una ciudadana francesa, murieron ayer tras el atentado ocurrido en un exclusivo centro comercial en el norte de esta capital colombiana.

Un estallido se produjo en un baño de mujeres en el segundo piso del centro comercial Andino, ubicado en un sector elegante del noreste de la capital colombiana y que estaba lleno, en vísperas de la celebración del Día del Padre. El alcalde capitalino, Enrique Peñalosa, calificó el incidente como un “atentado terrorista cobarde” y dijo que los expertos encontraron rastros de explosivos.

El presidente Juan Manuel Santos, quien estaba en Barranquilla, tuiteó: “Mi más enérgica condena al atentado en CC Andino. Regresando a Bogotá en este momento para ponerme al frente de la situación”. Antes que se dijera que fue un atentado, Santos había ordenado al director de la policía, general Jorge Hernando Nieto, “dirigir la investigación”.

La francesa fallecida fue identificada como Julie Huynh, de 23 años y quien según el alcalde Peñalosa se encontraba desde hace seis meses en el país, prestando servicio social en un colegio del sur de la ciudad. En el momento de la explosión la mujer estaba junto a su madre, quien habría llegado a Colombia para hacer turismo y luego devolverse a Francia con su hija.

Miembros de la Embajada francesa ya están con la madre de la joven, a quien las autoridades locales también estaban prestando apoyo.

La Clínica Country, uno de los centros asistenciales a los que fueron trasladados los heridos, indicó en un comunicado que las colombianas Ana María Gutiérrez, de 27 años, y Lady Paola Jaimes, de 31, “fallecieron como consecuencia de las lesiones sufridas”. Hay al menos otras 11 personas lesionadas, según el ministro del Interior, Guillermo Rivera.

La explosión se registró alrededor de las 17:10 horas locales. “Estábamos atendiendo a unos clientes y escuchamos una explosión en el segundo piso”, dijo a la AFP Michael Montoya, quien trabaja en la tienda Nicolukas, ubicada en el tercer piso. “Con mi compañera Viviana bajamos a ver qué había pasado y vimos gente llorando y con sangre. Fue en los baños”, informó. Varías vías alrededor del centro comercial fueron cerradas al paso de vehículos.

El general Nieto detalló que “fue un artefacto que instalaron en la parte de atrás de una tasa en el baño de mujeres. En este momento los técnicos antiexplosivos están haciendo la verificación de qué artefacto fue. Tengan la seguridad que pronto daremos resultados importantes en contra de estas estructuras”. Anoche se informó que se designó un fiscal de la Dirección Antiterrorismo para seguir la investigación.

Según el diario El Espectador, el director de la Federación Nacional de Comerciantes (Fenalco) Bogotá, Juan Esteban Orrego, dijo que a raíz del ataque se decidió llevar a cabo “un incremento importante de seguridad en todos los centros comerciales. Hay que ver exactamente qué fue lo que ocurrió. Tenemos una reunión el martes con todas las autoridades para dar tiempo de que hagan sus investigaciones. Las autoridades y los comerciantes estamos pendientes de cualquier eventualidad”.

Hasta anoche, nadie había reivindicado la autoría del ataque. La guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN), a la que se atribuyó otro atentado el pasado 20 de febrero, también en Bogotá, repudió lo ocurrido ayer. Tuiteó que jamás atacaría a la población civil y pidió “seriedad a quienes hacen acusaciones infundadas y temerarias; hay quienes pretenden así hacer trizas los procesos de paz”. Aludió así al acercamiento que tiene con el gobierno.

El presidente mexicano Enrique Peña Nieto expresó, vía Twitter, su “enérgica condena” al atentado y su “solidaridad con los familiares de las víctimas y los heridos”.

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