Los hijos de inmigrantes indocumentados han comenzado a plasmar en sus dibujos los temores que sienten por sus padres ante la posible deportación, tras las medidas migratorias adoptadas por el presidente Donald Trump.

“Voy a estar triste porque mi mamá no tiene documentos”, escribió Yadira de 10 años de edad en un lienzo, junto a dibujos de caritas con lágrimas.

“No quiero que Donald Trump nos separe de nuestra familia”, plasmó Galilea, de nueve años , junto a un dibujo en el que se observan las banderas de Estados Unidos y México separadas por un línea que representa a el muro que pretende construir Trump.

Hijos de inmigrantes dibujan sus temores
Hijos de inmigrantes dibujan sus temores

“Siento que los políticos estadounidenses no debieran separar a familias maravillosas y amistades que vienen de diferentes y únicas culturas y países”, escribió Jesús, de 13 años, en un mensaje acompañado de banderas de El Salvador, Guatemala, Chile y Perú, entre otras.

Los mensajes fueron escritos por hijos de los trabajadores del centro de Florida. Encierran “todos los miedos y temores” que están sintiendo los menores ante la retórica antiinmigrante del presidente Trump, dijo Jeannie Econamos, encargada de la Asociación de Trabajadores Agrícolas de Apopka.

Hijos de inmigrantes dibujan sus temores
Hijos de inmigrantes dibujan sus temores

Fueron dibujados durante una junta de la comunidad, días después de que se anunciara la intención del gobierno federal de contratar a 15 mil nuevos agentes para servicios migratorios y de fronteras.

El lienzo con los dibujos (conocido también como bandana) se ha convertido en una muda protesta ante las decisiones sobre los vetos migratorios, en una nueva tendencia que poco a poco se apodera de las calles de Nueva York y Los Ángeles ante las políticas de Donald Trump. En los años 70 la comunidad LGBT utilizó las bandanas para enviar mensajes en tiempos de persecución.

Hijos de inmigrantes dibujan sus temores
Hijos de inmigrantes dibujan sus temores

Las nuevas políticas en la materia han cambiado la vida de los inmigrantes indocumentados y muchos sienten temor de hacer sus actividades diarias comunes, como ir al trabajo, hacer las compras o llevar a sus hijos a la escuela.

Zoila Xuncax, maestra de la Escuelita Maya de Lake Worth que tiene 60 alumnos, todos hijos de inmigrantes trabajadores agrícolas, dijo que hay mucha “tensión y preocupación” en las familias. “Algunos padres optan por no enviar a sus hijos a la escuela, pero nuestra asistencia ha ido mejorando. Es obvio que los niños saben lo que está pasando y sienten miedo por sus padres y lo plasman en sus dibujos y en sus cartas”, señaló Xuncax.

Google News

Noticias según tus intereses