Washington.— Un comité del Senado de Estados Unidos controlado por los republicanos votó a favor de terminar con una prohibición de décadas a los estadounidenses para viajar a Cuba, lo que da el impulso que el presidente Barack Obama necesita para reducir las restricciones a los viajes y abrir más las relaciones con el país caribeño.

El gobierno de Obama emitió normas en enero para facilitar los viajes a Cuba y permitir que haya vuelos programados con regularidad. La votación del Comité de Asignaciones Presupuestarias, de 18 votos a favor y 12 en contra, surge días después de que Estados Unidos y Cuba terminaran formalmente con más de medio siglo sin relaciones diplomáticas.

“Tenemos la oportunidad de aumentar las posibilidades de que el pueblo cubano tenga mayores derechos y libertad con la capacidad de conectarnos con ellos”, dijo el promotor de la iniciativa, Jerry Moran. “También diría que como estadounidenses tenemos ciertas libertades que valoramos mucho y que hoy los estadounidenses pueden viajar por el mundo sin excepción. Ningún país está totalmente prohibido, a excepción de Cuba”.

“Este es un primer paso del Senado para desmantelar una política fallida de 54 años”, dijo el senador demócrata Patrick Leahy. “Estos votos no tienen que ver con las repugnantes políticas del régimen de Castro, sino con eliminar impedimentos a los viajes y al comercio que el gobierno ha impuesto a los estadounidenses”, agregó.

En cambio, el Comité de Asignaciones Presupuestarias de la Cámara Baja avanzó en dirección opuesta, pero el desacuerdo entre los republicanos hace menos probable que el Congreso controlado por ese partido trate de usar los gastos del gobierno para oponerse al acercamiento de Obama con Cuba.

El panel también votó para retirar las restricciones a los barcos que envían productos a Cuba y tienen que esperar seis meses para regresar a EU.

La ley sobre Cuba fue agregada a una iniciativa de 21 mil millones de dólares del Departamento del Tesoro, que se encarga de revisar el cumplimiento del embargo económico sobre el país caribeño.

El lunes Cuba reabrió su embajada en Washington y ambos países restauraron los vínculos bilaterales. Sin embargo, el cambio ha encontrado fuerte resistencia, especialmente de legisladores cubano-estadounidenses respaldados por líderes republicanos del Senado y la Cámara.

Estados Unidos mantiene el embargo comercial de medio siglo que aplica a la isla caribeña y sólo el Congreso controlado por los republicanos podría levantarlo, algo que hasta el momento rechaza.

Denuncia al gobierno de la isla. En este contexto, la organización Human Rights Foundation (HRF), dedicada a la observación y cumplimiento de los Derechos Humanos en el mundo, acusó el 22 de julio al gobierno de Cuba de opacidad en las investigaciones y responsabilidad directa sobre la muerte del opositor al régimen Oswaldo Payá Sardiñas en 2012.

En un documento sobre el caso, HRF dijo que el gobierno cubano excluyó de manera deliberada información sobre los hechos ocurridos el 22 de julio de 2012 en la localidad cubana de Gabina, donde Payá murió en un accidente automovilístico junto con Harold Cepero, quien lo acompañaba en el momento del accidente.

Denunció que el gobierno cubano violó derechos humanos básicos, como el acceso de los familiares de Payá a los avances de la investigación, todo esto con el propósito de ocultar lo que califica la ONG como un asesinato de Estado. Agencias y Redacción

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses